Un Restaurante que nunca pasa de moda, de los que siempre permanece en mi circuito gastronómico. Hablar de mariscos es hablar de La Casa del Marisco. El pancito siempre delicioso y el tres leches matadorrrrr
Platos recomendados
Calificar el restaurante (recibe 20 puntos)
Precio por persona de: Entrada + Plato principal + bebida SIN ALCOHOL
Precio = Entrada + PLato principal + Bebida
Como siempre restaurante que te saca de apuros. Me gusta mucho su estacionamiento seguro. Ambiente agradable. La parillada de mariscos para dos excelente. Precio justo. Por una copa de vino pagas la botella.
Nuevamente visitamos a nuestro viejo amigo, este comedero español de buen gusto y buenos mariscos. La parrillada de mariscos y el mero a la vasca estuvieron deliciosos. De postre la crema catalana nos endulzó la noche. El Verdejo nos acompañó a las mil maravillas. El ambiente como de costumbre, amplio, elegante y de buen gusto. El Servicio esta vez fue de rutina, no excepcional. Sus orquÃdeas siempre florecidas se exhiben en su pared predominante como una mural natural hermoso.
Siempre que llego valoro más su estacionamiento en la parte de atrás donde con luz suficiente y área extensa y reservado dejo con tranquilidad y me siento seguro. Los Dendrobiums amarillos (léase orquÃdeas) que adornan y cambian con frecuencia colgando del viejo árbol que adorna la sala principal cada vez me gustan más. Sus sillas amplias, aunque de madera y duras son cómodas. (No me contradigo). El menú cambia poco pero me pregunto para qué, no como todos los dÃas allà y es suficiente para mi gusto. Las almejas, el mero a la vasca, los langostinos y los calamares todos estuvieron muy ricos aunque con un poquito más de aceite del que me hubiera gustado. Los niños comieron sus muy queridos espaguetis (no sé como quitarles el vicio). El servicio presente y bueno pero no tan amable com el que me tocó la vez pasada. (No todos somos iguales). Un Gran Tarapacá Chardonnay nos hizo los pases de rutina. El postre y el té al final, los calificamos como postres y té rutinarios.
Después de un mes de ausencia volvimos en mi cumpleaños. Fuimos con niños los cuales disfrutaron enormemente la guabina y la ternera. La zarzuela de mariscos y el lenguado inmejorables. El saborsito español siempre presente hace que al que le gusta esta sazón disfrute mucho de este restaurante. Me encanta su amplio estacionamiento y su volumen espacioso. Hoy nos toco a Alberto Bruno como mesero. Su atención nos hizo la noche. Muy atento, supo manejar a la perfección a los niños. Su trato cariñoso y siempre presente sin abusar de su presencia es un verdadero plus para el que tenga la suerte de ser atendido por él. El Chardonnay Tarapacá acompañó a la comida Marina de pelÃcula. El flan de la casa, es un flan de la casa.
Asegúrate de que tu información esté actualizada. Además usa nuestras herramientas gratuitas para encontrar nuevos clientes.