Quedé asombrada por la decoración del restaurante, me encantó! Ordenamos el smoked avocado como entrada, luego como platos fuertes el risotto negro de mariscos y em Chateaubriand y cada uno de los más delicioso que el otro. El servicio en general 10/10 y la atención del joven Carlos fue de primera.
Platos recomendados
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Precio por persona de: Entrada + Plato principal + bebida SIN ALCOHOL
Precio = Entrada + PLato principal + Bebida
El restaurante tiene un ambiente excelente, es acogedor, relajante y con buena música. Al llegar, te sientes como si hubieras sido transportado a Tulum. El servicio fue excepcional; el mesero fue muy amable y atento. Debido a una condición personal, no puedo comer carne en término 3/4, pero a mi esposo sí le gusta. El mesero, de manera muy considerada, nos ofreció una piedra caliente para que yo pudiera continuar cocinando mi carne a mi gusto, mientras mi esposo disfrutaba de la suya en el término que prefiere. La comida en general es buena, aunque podría mejorar en algunos aspectos. Me encantó la brocheta de pulpo y el Ribeye. Las empanadas no estaban malas, pero son más pequeñas de lo que se muestra en la foto.
Comienzo por lo positivo. El lugar es agradable y cómodo, con buena decoración y una excelente vista. La comida, sin embargo, es regular. Le falta un toque especial. El pulpo no parecía estar bien a la parrilla, y el filete de carne estaba mas o menos, le falto sal y pimienta. La atención, aunque intentaron destacarse, es deficiente. No toman nota de los requerimientos de los clientes. En nuestra mesa éramos cinco personas, y hubo incidentes en tres platos y una bebida, que no siguieron las indicaciones o solicitudes del cliente, causando molestia e incomodidad. El precio es elevado, lo cual debería compensarse con mejor comida y servicio. Deben mejorar; de lo contrario, no se merecen las propinas.
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