En la Fonda

Me encanto mucho el ambiente, es muy diferente y autoctono. La atenciom en excelentes y sus ambientes buenisimos. Un lugar para compartir en familia o en grupo.

Cuando entras al restaurante te trasladas a una fonda típica del interior. Muy buen ambiente. Muy bonita la decoración. La barra es un diablo rojo muy colorido. Hay ropas colgadas por todos lados. Los baños algo rústicos con cutarras en la puerta y una palangana de metal de lavamanos. Fuimos mi esposo y yo un lunes, no había mucha gente. La camarera muy atenta, quizás demasiado, sentí que nos sirvieron demasiado rápido ya que no habíamos terminado la entrada y ya venia el plato fuerte. Aun así disfrutamos del lugar. La comida estaba buena aunque muy cara para lo que ofrecen. Lo mejor, las torrejitas de bacalao. Pedimos chuleton y pulpo a la caribeña. Tienen valet parking gratis. Probablemente regrese para disfrutar del show ya que en esta ocasión fuimos temprano y no tuvimos la oportunidad.

No fue para nada de mi agrado! Fui con muchas expectativas pero la comida estaba súper mala!!!!! Pedí un sancocho a la leña y resulta que adentro mi sancocho tenía trozos de leña y estaba incomible. Pedí adicional un plato fuerte y no era lo esperado! Si tienen un medio ambiente y una decoración pero no regreso

El lugar es increíble la decoración hermosa y muy lindo para los extranjeros, la comida es buena pero puede ser mejor, las torrejitas son muy gruesas y la masa tiende a estar cruda en el centro, el lechon, el chorizo tableño muy rico Pueden mejorar en las hojaldres, pastelitos para que sea más autóctono de nuestro país

Salimos a almorzar con varios peregrinos para q comieran cosas típicas pero no estaba tan buena la comida en general. Solo las picadas me gustaron: carimañolas, empanadas y tortitas de bacalao. Luego ni el pulpo ni los patacones con camarones ni el guacho se rabito estaban muy buenos. Estaban insípidos con poco sabor. Los he probado mucho mejor. Por otro lado el servicio y ambiente fue lo mejor.