Concolón

El lugar es bien agradable, note un toque muy personal en la decoración y la música ambiental. El licuado de maravilla muy generoso y rico, respecto a la comida, le faltó más sabor, para pensar que es panameña, pero en general estubo bien, pedimos concolon con lechona, el colon fue un buen intento, estaba crocante pero el arroz era muy delgado y no me hizo recordar el concolon de mi abuela, la lechona está muy simple para mi gusto, unas tortillas con queso muy ricas. En fin recomiendo el lugar, pero considero que hay espacio para darle un toque más panameño.

La comida está bastante buena 100% típica panameña, tienen una gran variedad de postres a precios accesibles. Me encantó el pie de limón en copa

Pedimos varias cositas para probar y compartir. La orden de hojaldra está muy chiquita, la lechona estuvo muy rica, el one pot estuvo picante pero sabroso y los chicharrones y carimañola también, con lo demás: patacones, yuca al moho, yuca frita, lasaña de plátano no estuvieron tan buenas. Las porciones en general son pequeñas.

Un buen lugar para probar comida panameña con su toque gourmet. Pedimos el pork belly o panceta y estuvo muy bueno. El pellejo crocante y la carne suave y jugosa. Los acompañamientos de patacones, yuca al mojo y ensalada de feria, todos en su punto. La atención y el ambiente buenos. Lo único que habría que mejorar es dónde estacionar. Y como esta en una calle sin salida, las opciones de estacionar son muy limitadas.

Un concepto de restaurante típico panameño con decoraciones típicas de nuestro país y de la región. Precios accesibles. Preguntar por los platos que no aparecen en el menu, los sorprenderán! Delicias! El Pork Belly es la estrella de este pintoresco sitio, delicadamente suave y jugoso por debajo y crocante crispy por arriba, una amalgama de sabores y texturas. Mmmmmmmmm