Wahaka

La comida tiene excelente presentación pero el guacamole lo senti pasado en acidez. De sus cocteles, me encantó la frozen. Ofrecen un ambiente de restaurante y cambia a disco después de las 11pm. Lo que no me agrado fue el tamaño del menú, lo vi demasiado grande y pesado que ni cabe en la mesa. Por todo los demás excelente, nuestro mesero fue muy atento.

Muy buena sorpresa mexicana Gourmet en Panamá. El guacamole está muy bueno, los chilaquiles verdes bien, pero lo mejor fue el taco al pastor! Se toman el trabajo de prepararlo. Tienen música en vivo y el bar está muy bien! Por mejorar la tortilla de maíz del taco pero están cerca de ser el mejor de Panamá

Ayer teníamos una sorpresa de cumpleaños a una amiga, ya que tanto hablo del lugar y la comida, sobretodo de la atención, llegaron los mariachis a cantar no había llegado la cumpleañera, yo decía qué raro, resulta que no la dejaron ingresar al sitio, por un dress code no esta ni en la reserva, no está en el correo de la reserva, o en ninguna parte del restaurante por escrito, los Seguridad empiezan a decir no la van a dejar ingresar, al sitio con una actitud horrible, empujaron a mi amiga a uno de los invitado de la fiesta tampoco, lo dejaron regresar a la mesa, a todo esto fue una experiencia horrible, si van a celebrar su fiesta de lo que sea, es preferible otro lugar, cero experiencia en eventos, muy desagradable, nadie nos dio solución Ali excusas, de que estaban esperando respuesta, nos tocó salir del local casi cancelar en la calle de la vergüenza no vuelvo más y no lo recomiendo, fuera de lugar todo

Wao wao waoo! Espectacular, he quedado anonadado con la fusion de sabores en los platos de comida que este restaurante ofrece. Excelente para ir en familia o para divertirse con amigos después de una comida mexicana de calidad. Los precios van acorde a la porción y exquisites del plato elegido.

Para iniciar como restaurante, al llegar al local y ver guardias de seguridad y cintas para filas me pareció algo ridículo. Como sólo iba a cena de dos personas me pareció aún mas ridículo que al no tener reserva no había host si no que el seguridad decidia si daba el pase al local. Al final entramos y dimos la oportunidad. Nos dieron espacio en barra, pero sólo había una silla. Los cócteles estaban ok, nada impresionante. Luego pedimos las flautas de pato y un guacamole para iniciar. Las flautas estaban aguadas y el gucacamole no hay manera de hacerlo mal así que al menos en ese si les salio bien. Viendo la dinamica del mal trato, mal menú, tragos insípidos y un ambiente mixto entre super jovenes o super adultos, decidimos partir a otro lugar y cerrar la experiencia en este local. El ambiente era parecido a un quinceaños, gente muy joven y muy adulta. No estaba seguro si estaba en una rumba o cena. Al final se apagan las luces y comenzó el bailoteo mientras aun se daban platos de cena en los alrededores. No recomendado