Salsipuedes

La comida muy buena, la fusión de sabores y su integración con los ingredientes nacionales es fenomenal.

Todo empezó con el pan, una canasta conteniendo una colección de obras de arte que provocan no pedir mas nada mas que comer pan.... Excelentes entradas, entre ellas la ensalada y la sopa con pollo son fantásticas. De los fuertes, los langostinos son cocidos a la perfección, pero por favor, guarde espacio para el postre, no se arrepentirá.

Barandas era uno de nuestros favoritos pero aumentaron astronómicamente los precios y el servicio decayó así que dejamos de ir. Aprovechamos el Panamá Restaurant Week para ver si había cambiado ahora que lo reinventaron como Salsipuedes. Nos gusto mas el ambiente ahora que antes. Mucho mas acogedor. El servicio parece que a vuelto a sus estándares originales. Sin embargo la comida dejo mucho que desear. La presentación estaba muy bonita pero a todo le faltaba sazón. Lo mejor fue el Baked Alaska de postre que sigue siendo excelente! El menú regular sigue caro en mi opinión y se puede comer mucho mejor en otros restaurantes de esa categoría a mejor precio. Dudo que vuelva.

The only thing missing is Mr. Avo Uvezian playing the piano on a corner of this wonderful joint. Everything is a pleasure when you go to this restaurant, from walking through exquisite artworks from local and Latin American artist to the last sip of a very well done espresso. You can enjoy with the same enthusiasm from a local beer to the best wine, what the chef has accomplish modernizing local everyday dishes from the local Panamanian gastronomy it's fantastic. Well done !

De verdad que fue una desilusión este restaurante. El ambiente bonito decorado pero el aire pega en todos lados. De entrada pedi el lechon que estuvo un poco pasado de sal, el sour cream sabia pasado y nada fuera de este mundo. De plato fuerte la sopa de lenteja. A quien le puede salir mala una sopa de lenteja? Esta estubo malísima, tan mala que ni me la pude terminar. Alguien pidio la hamburguesa y ni se comio la mitad de lo mala que estaba. Las papitas vinieron aguadas y frias. La ensalada caesar con pollo vino sin el pollo, cuando se dieron cuenta mandaron un plato con pechuga. El servicio maluco, no rellenan los vasos, se llevan algunos platos y no vuelven por los otros. La verda que hubieran dejando barandas tal cual estaba. No vuelvo y no recomiendo