Tenía un expectativa mayor de lo que disfruté mi visita a esta emblemática boullangerie, fuimos a merendar, pedí varios postres del menú y no había ninguno de los solicitados, uno relleno de crema pastelera, ningún postre con manzanas, ni orejitas o palmeritas, la mesera quedó en averiguarme alguna opción con fruta y nunca me dio alternativa o respuesta de vuelta, mi esposo pidió milhojas y estaba rico pero no de morirse...mi hijo wafles con chocolate, y era chocolate amargo, también estaba rico pero nada memorable. Podrían ponerle crema chantilly al wafle... no se, era como simple. Los cafés normalitos. No me parece una experiencia extraordinaria, sino mas bien normal.
Platos recomendados
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Precio por persona de: Entrada + Plato principal + bebida SIN ALCOHOL
Precio = Entrada + PLato principal + Bebida
No me mato esperaba mas por un bistro francés los precios un poco altos para la cantidad. Los meseros un poco enredados el servicio lento para la cantidad que tienen. La creme boule que debe ser el postre insignia no lleno las expectativas y demoro porque no lo realizaron bn capa demasiado dura y eso tiene su tecnica. Creo q no volvería
Excelente comida se fijan en todos los detalles una buena atención todos los platos son estupendos, su menú muy ilustrativo.
Buen lugar de encuentro con amigas, buen café y postres, pero también la comida, el tartar de atún muy bueno, el servicio es bueno, siempre están full y sin embargo atienden rápido.
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