La comida es muy gresca y la combinación de colores, sabores y texturas muy muy buena, sin embargo en el Momento que fuimos estaban colapsados, el servicio fue pésimo, aun cuando había esmero en el personal, solo que eran insuficientes para la cantidad de mesas, y el orden de la bebida y la comida no estuvo bien, a mi me llegó mi jugo después de haber comido. Creo que les falta organización. Voy a darle una segunda oportunidad por el gusto y la calidad de la comida, pero deben esforzarse en servir mejor. Había platos que no eran para comerse con cubiertos, sino con palitos. Hubo mesas a las que les ponian wantones de arroz y otras que no. En fin.

Descubrí este maravilloso lugar por haber visto sus fotos en Instagram, sobre todo de la variedad de sopas que tienen. Me tomé una sopa de marisco deliciosa, El lugar es muy cálido, la gente es amabilísima, todo esta hecho con cariño y se nota. Tienen una variedad de sopas para llevar extraordinarias, me provocó muchísimo a la vista el Minestrone, la crema de zapallo, también tienen postres muy ricos. Y una oferta de productos gourmet y gluten free.

Uno de mis sitios favoritos para desayunar, mimosa, coissant con bechamel, las omelettes son extraordinarios. El sitio es muy bonito y parisino y el servicio muy atento.

A pesar que nuestra experiencia fue buena, la comida no fue ultra memorable, estaba correctamente preparada, sopa de cebolla, corvina con salsa de hongos, el ambiente estaba bien pero faltaba que el aire enfriara mas, el servicio muy bueno y atento, conocían la carta y las recomendaciones fueron adecuadas.

Es una de las mejores opciones de comida típica panameña, las porciones son grandes, los ingredientes muy frescos, yo me comí un guacho de mariscos, estaba sublime, antes habíamos pedido una bandeja de boquitas surtidas, que estaban muy buenas. Tuvimos la suerte que fuimos un sabado en la noche y hubo un show de típico muy grato, a nuestros visitantes que estaban con nosotros, les encantó tanto la comida como el show. El servicio muy bueno y amable también, todos los que nos atendían estaban sonrientes y con una excelente disposición para explicar los platos. Yo volveré a comerme otra vez el guacho y a probar nuevos platos de la gastronomía típica panameña. Ademas esta en el casco que siempre es un gran paseo cuando vienen visitantes de afuera.

Siempre habíamos ido a comprar comida para llevar, expresamente panes y helados, y esta vez nos quedamos a comer, fue una experiencia muy grata, y lis precios de los platos servidos versus la cantidad abundante nos sorprendieron por económicos, mi esposo pidió pollo a la parmesana y ademas de que estaba muy bueno era enorme, lo acompaño de pasta corta al filleto y también estaba muy buena, mi hijo pidió un desayuno a pesar que era cena, huevos fritos con tocino, eso no requiere mayor destreza pero el pan estaba sublime, yo solo pedí chupe que era una de las alternativas de sopa del día, y estuvo para repetir, buena textura, sabor y ricos y abundantes trozos de gallina, papa, maíz y queso. Insisto las porciones de comida son super abundantes y la relación precio valor es extraordinaria. Llevamos para la casa un pan de jamón y esta mañana lo desayunamos y estaba extraordinario. El servicio maravilloso.

Fui a merendar y tomar café, nos encantó el concepto del lugar, el olor a café desde que entras es extraordinario, provoca tomarse una jarra, no una taza, el croissant y unos bizcochos con almendras con los que acompañamos el café estuvieron muy bien y apropiados para merendar La atención normal, sonrrientes, haciendo se trabajo adecuadamente.

La pasteleria es extraordinaria, en especial la cola de langosta de crema, es sublime, tienen tortas muy bellas y tradicionales como profiteroles, revisen el instagam de ellos para ver las tortas, el sitio es bonito y agradable, probamos croissant de nutella, cola de langosta de crema pastelera, babá y milhojas de manjar, y todo estuvo delicioso.

Desayunanos las famosas empanadas de queso de quesos chela, y son extraordinarias. Tambien probamos las enpanaditas de carne y el café muy muy bueno, lo recomendamos mucho

Este es un lugar muy auténtico y lindo del Cangrejo, el ambiente es lindo, la música adecuada, el servicio muy amable y cercano, pero lo mejor es la oferta gastronómica, todo lo que pedimos estuvo mejor de lo esperado. Pedimos un croissant con nutella (que no estaba en menú) pero que ellos amablemente recomendaron para mi hijo de 10 años. Nosotros pedimos empanada de capressa y quiche de hongos y cebolla caramelizada y ambas opciones estuvieron muy buenas, además pedimos café, servido con arte, esmero y con sabor a cariño de barista. Y para nuestro hijo sugirieron en vez de un chocolate caliente un "hot nutella" muy bueno tambien.