Mar de Grau

Fuimos a cenar ayer con unos amigos a Mar de Grau y quizás con expectativas muy altas nos fue OK. Pedí unos langostinos a la termidor con puré, estaba muy rico si lo visitan lo recomiendo. Mi acompañante pidió una corvina a lo macho, no estaba mala pero hemos probado mejor contemplando la cantidad de rest peruanos en Panama. El servicio y la limpieza debe mejorar. Pedí una copa de vino, la copa vino sucia de lipstick ( desagradable) me la cambiaron, pero ya no me la pude tomar. ( adicional a que la trajeron tarde, le tuve que recordar al mesero) Muy poco personal, para la cantidad de mesas solo tenían 2 meseros pero veía mas a uno que atendía todas las mesas, había que pedirle las cosas varias veces... critica constructiva, mas personal atento, mas limpieza en los platos, vasos, cubiertos. La comida no esta mala pero si no hay limpieza opaca todo lo positivo del restaurante.

Lo único malo de este lugar es que tienen pocos estacionamientos, la carta es amplia y tiene para todos los gustos. Probamos la corvina con camarones y estaba súper rica de buen tamaño en proporción al precio. El cau cau de mariscos también buenísimo. De postre es imperdonable irse si probar el suspiro limeño. Hay que volver para seguir explorando el menú. El servicio un poco lento pero el restaurante estaba llenísimo y había pocos meseros.

Mucho más agradable el local de el que tenían por Calle 50. Buena comida, muy buena atención. Limpio y recomendado.

Comida muy buena. No como mariscos pero voy para complacer a los que si les gusta, el filete mignon delicioso, nunca he escuchado ninguna queja de algún plato de comida del lugar, por el contrario todo el mundo siempre queda satisfecha. El pie de limón es muy malo, pero el dulce de chocolate es delicioso.

Excelente experiencia este restaurante. Es una joya. Bastante modesto, sin embargo, la comida es deliciosa. Pedí un filete mignon riquisimo, cantidad de papitas muy pocas, pero delicioso el sabor del filete. Mis demás acompañantes pidieron corvina rellena de camarones y corvina a lo macho, quedaron muy satisfechos. El pie de limón es pésimo, pero el dulce de chocolate y el suspiro a la limeña quitan el sueño de lo buenos que están. No tiene mucho estacionamiento.