Los Años Locos (San Francisco)

Un clásico panameño: hay de todo y para todos. Su carta es variada y deliciosa, amplio menú de bebidas y cócteles. Lo más entrañable: su finísima atención. Recomiendo sus espacios reservados.

Es uno de los ambientes tradicionales más recomendados. La atención es muy personalizada, los platos variados y deliciosos, y las bebidas muy bien elaboradas.

En esta ocasión decidimos probar la parrillada los años locos y nos la sirvieron bastante rápido, alcanza perfectamente para 2 personas y a pesar que pedimos termino bien cocido bien cocido, todo estaba muy rico y jugoso lo cual me sorprendió gratamente, sin embargo el pollo les quedo algo crudo, con partes en las que aun tenía sangre, por esto no les di las 5 estrellas, además que el salad bar no lo cambian y realmente me parece bastante básico. Por lo demás, ambiente agradable, atención buena pero que podría mejorar ya que olvidan constantemente rellenar las copas de agua.

Aqui tienes 3 ambientes para escoger, lo que convierte a LAL en un restaurante bastante versatil. Mi visita de esta semana fue de negocios, una buena cena, con un servicio amable. Le faltaron algunos cuantos detalles para llegar a 5 estrellas. La entraña sigue siendo fenomenal, y el resto de colegas habló muy bien del bife de chorizo importado. El pastel de limón no puede faltar, asi que dejen espacio disponible para esto. Los precios han subido estrepitosamente, pero así ha sucedido en casi todos los restaurantes de nuestra bella ciudad. Sin duda una buena opción para darse un buen gusto de carnes y vinos.

Si quieren imitar a una parrillada Argentina, deben esmerarse en entrenar a los parrilleros un poco más. Cosas tan sencillas como usar sal gruesa y más nada, pueden hacer toda la diferencia. El salad bar no merece la pena ser catado, asi que lo voy a obviar de mi calificación. Las empanadas argentinas son muy ricas, al igual que el pie de limón que ofrecen de postre. Las carnes, a menos que sean importadas, no tienen casi sabor. Por suerte hacen un chimichurri bastante decente y la salsa de tomates, pimentones y aceite es muy buena, asi se puede "arreglar" el sabor del plato. La atención en esta visita fue muy superior si la comparo a visitas pasadas. El ambiente es bueno, pero deben considerar bajar un poco el volúmen de la musica en el área de restaurante. En la mesa teníamos que levantar bastante la voz para ser escuchados. El área del bar y la terraza ofrecen una muy buena opción para un par de tragos o vino después de una larga jornada de trabajo. Cheers!!!