Krume Backer (San Francisco)

Reservamos para dos personas y el lugar no están grande. Si planean ir en grupos de 4 o más personas lo ideal es que reserven con tiempo. La comida estuvo muy rica, la calidad y frescura de los productos se sentían espectaculares, adicionalmente las porciones son buenas.

Esta panadería es totalmente diferente a todo lo que hayas probado, un 10/10 en todos los sentidos. La esencia desde que entras te transmite su propósito de contar con todo fresco y la calidad de materiales orgánicos que utilizan se percibe en todas sus preparaciones. La combinación de sabores en todas sus tostadas es novedosa, original y deliciosa, mi favorita la de salmón y huevo; los mini pancakes austríacos con salsa de frutos rojos tiene el toque dulce perfecto; los cafés son del más alto nivel y la opción de llevarte a casa pastelería excepcional hace esta experiencia sobresaliente.

El lugar algo pequeño (me toco compartir mesa con varias personas) pero bonito y minimalista. Sus panes, a pesar de ser de masa madre, saben casi igual a un pan de levadura comercial. Cuando fui, probe su tostada con pera caramelizada y sus pancakes con mermelada de frutos rojos. La tostada muy buena y los pancakes estaban TAN esponjosos (jamás había comido pancakes así), pero admito que sabían igual a un pancake normal, tenia MUY poca mermelada y sentía que era una porción pequeña también. Aparte, me lleve 4 panes dulces a casa. Estaban bien, nada WAO. Creo que este lugar es mas para personas que ven importante que sus panes sean de masa madre (ej.: intolerantes al gluten).

Un lugar diferente, acogedor y con una variedad de pancitos deli deli, el café es exquisito. No puedes dejar de probar el pan con canela y cardomomo.

Un lugar diferente para compartir un buen café y panecillo de masa madre con variedad de sabores. La atención es excelente. Si eres intolerante al gluten en este lugar puedes probar los panecillos de limón y lavanda o el de canela.