Doscucharas (Costa del Este)

Lo mejor los postres, tienen buena variedad, el café es su punto débil, a veces bueno a veces no. Los emparedados estan bien al igual que el servicio. Una cafeteria yeye como dicen aquí.

Hace dos semanas fui a comer los dulces que tanto han comentado aquí. Pedimos el volcán Baru, un Taty de fresa, entre otros. El volcán Barú lo pedí con helado adicional, me pareció un buen postre pero definitivamente es para dos personas. La Taty de fresas muy rica, en su punto, también pedimos un paison de limón que estaba bueno, un cake de naranja de buen sabor, pero un poco seco, un cake de manzana muy bueno, uno de mis amigos pidió un jugo de piña que estaba bueno, según lo que dijo. La atención es regular y el ambiente es bueno. La semana pasada fui a comprar unos dulces para llevar y lo que no me gustó fue que uno de los meseros me tomó la orden y me dijo q me siente en una mesa y me lo llevaría, pero yo estaba apurada, así que le dije que no. Cuando me trajo la cuenta incluía la propina. Ahora entiendo su afán de querer que me sentara en la mesa. Cuando fui a la caja a pagar, la cajera me dijo q no debería incluirme la propina si solo estoy comprando para llevar. Eso no me gustó del mesero!

Me encanta este lugar para comer el postre, pedimos para compartir 3 dulces, la cúpula de maní, el cual es un most en este lugar y esta recomendado para hacer alguna actividad física ya que sientes que te estas comiendo un snickers, la tartaleta de Eva con helado de vainilla, estaba muy rico, es un pie de manzana con helado de vainilla y el mil cucharas, que es de queso con galletas de israel, todos muy ricos.

Sea de mañana, tarde o noche, este lugar tiene algo que ofrecer. Ambiente bien decorado y muy relajado para conversar o pasar el rato con un postre o cafe. Recomendados los licuados de frutas y el postre volcán barú.

Hace unas semanas estuvimos allí para Brunch. La verdad que la experiencia fue muy buena. El servicio amable, las bebidas perfectas y la comida estaba increíble. Todo lo que probamos estaba demasiado bueno. Terminamos quedándonos prácticamente toda la la tarde probando varios platos del menú y luego los postres... El pie de limón increible, la tartaleta de fresas espectacular y el Volcán Barú, es algo del otro mundo... no he probado nada igual. Me encantó el lugar y lo recomiendo para pasar una tarde tranquila disfrutando de la variedad de platos que tienen.