Hice mi reserva el jueves anterior al 14 de febrero, y que el mismo día me llamaron para confirmar la reserva e informarme que el menu era preestablecido y que costaba 60 dólares por persona, sin incluir bebidas. Obviamente ese día ya no iba a poder conseguir reserva en ningún otro lugar, así que no me quedó más remedio que aceptar las condiciones recién informadas.
Fuimos el 14, y nuestra reserva era a las 7:30 pm. Nos dejaron esperando largo rato y finalmente nos sentaron en nuestra mesa a las 9:00 pm. La desorganización era monumental. Muchos clientes molestos en fila protestando, y varios se fueron sin comer, disgustados por la pésima organización.
Finalmente nos sentaron y nos trajeron la comida. Para el primer plato eran muffins rellenos de salsa holandesa trufada, estaban secos y fríos. Sin salsa. El segundo plato era un niguiri hamachi y estaba delicioso.
Para el tercer plato había dos opciones: Rissotto de queso Brie y Conchiglioni Short Rib. El arroz del rissotto, contrario a lo que dicta la lógica estaba crunchy, así que asumo que estaba medio crudo. El Short Rib estaba bien de sabor, pero la porción era mínima.
Para el cuarto plato las opciones eran Mero y Costillar de cerdo. El mero delicioso, pero la costillas de cerdo, aunque con buen sabor, estaba un poco dura. El mero estaba acompañado de una ensaladilla que estaba buena, y el cerdo acompañado de un milhojas de trufa.
Para el postre había un pie de manzana deconstruido que tenía muy buen sabor, pero estaba servido en un plato plano, así que al estar presentado sobre una capa de crumbs, era muy difícil de agarrar con la cuchara sopera que nos dieron para comerlo. Literalmente había que corretearlo por el plato.
La segunda opción de postre era Chocolate en texturas, el cual estaba delicioso.
Ni bien habíamos terminado de comer el postre (45 minutos después de sentarnos), nos trajeron la cuenta, sin haberla pedido. Básicamente el mensaje fue: Los dejamos esperando una hora y media, pero queremos que se larguen en menos de una hora.
Realmente fue una experiencia decepcionante. Hemos ido en otras ocasiones y siempre nos había ido muy bien. Mi recomendación: si no se pueden organizar para este tipo de eventos, no los hagan, y quédense con su menú normal, sin recibir más reservas de las que físicamente pueden manejar.