Delirio

La comida estaba buena, el ambiente es regular. Lo malo fue la atención, la que nos atendió lo hizo de mala gana, también al retirarnos los platos de las entradas prácticamente los Tito uno sobre otro haciendo mucho ruido.

El ambiente es muy tranquilo, el servicio es algo lento más las personas son muy amable. Pedimos una entraña estaba muy cocida, unos médallones que estaban deliciosos. El pescado a la plancha q es una opción bastante saludable. Nota importante habían muchas moscas dentro del lugar.

Es un restaurante decorado muy bonito, limpio, el aire adecuado. Tienes opción de comer almuerzo buffet o a la carta. En esta oportunidad me fui a la carta, pedí una pechuga de pollo al grill con yuca hervida. La porción de la pechuga es grande si eres de comer poco podrían comer 2 personas y pedir una guarnición adicional. El servicio no es malo pero tampoco bueno. Quizás el señor tuvo un mal día. Si me preguntan Volvería? La respuesta es Si

Si estás en Santiago es una opción a considerar; ya que no hay muchas.- el lugar es tranquilo; menú sencillo. en cuanto al sabor es bueno, las porciones bien ! los meseros muy atentos.-

Luego de muchas visitas a este restaurante en Santiago, con pesar tengo que decir que esta ha sido una mala experiencia. Notamos que una sola persona atendía mesas y cobraba. Aunque esmerado el joven, la comida tardó mucho y no cubrió las expectativas.