Salsipuedes

Empecemos por lo bueno. Desde el valet parking vamos bien. Decoración con muy buen gusto. El menú muy conciso y con excelentes opciones de comida nacional con un twist de fusión. No había la entrada de lagarto que quería no obstante la descripción del pulpo no me dejo ver para otro lado. El pulpo es un plato difícil de cocinar al punto perfecto y este es el ejemplo de cómo NO DEBE quedar (chicloso en el centro y baboso en las puntas). Los platos fuertes excelentes más los aplausos se los lleva el postre con una selección bastante peculiar de sabores para este típico platillo (café, key lime pie, chocolate y original). Personalmente volvería a ir para dar oportunidad de probar el lagarto y definitivamente pediré la selección de arroz con leche que recien probé.

Ambiente acogedor, los meseros amables y atentos a cada detalle solicitado, pero lo mejor fue la comida: EXQUISITA! Cada plato con un toque único, sientes que estás comiendo algo nuevo, aunque pidas pollo, corvina y salmón en Salsipuedes sabe distinto.

Me encanto todo! La atención, el Hotel, La Comida, todo. EL desayuno súper recomendado, variado, de buena calidad, varias estaciones, el personal muy Atento, unos tacos riquísimos, la Chef Candy muy atenta. Lo recomiendo.

Quería comenzar el primer sabado del año con un buen brunch. Asi que decidí darle la oportunidad a salsipuedes. La verdad que todo estuvo bastante normal cabe destacar. Empeze con una breakfast sausage. Que me parecio ok mas no lo recomiendo ya que la porcion en mi perspectiva estaba bastante pequeña y termine con waffle sandwish que estuvo bastante bueno y me parecio bastante creativo. El servicio estuvo bueno y el ambiente bastante acogedor. Quisiera darle otra otra oportunidad en algun almuerzo o cena para ver que tal.

Recientemente cambiaron la carta, probé el cocodrilo, croquetas de portobello, tacu tacu de porkbelly, y todo lo que pedí estaba delicioso. La atención es muy servicial y trato amable. regresaría sin dudarlo.