Rino's

Y ahora la visita, fué a celebrar un cumpleaños! oh sorpresa, al ordenar una copa de vino Chardonnay, y recibir del salonero la respuesta, no lo hay! Sin embargo, se hablo con alguien más, y llegó. La entrada, la de siempre, almejas en salsa pomodoro, recomendadísimas a ojo cerrado, plato fuerte rico y de postre, tal como se pidió a la hora de la reserva, llegó con velitas de hbday! Después del altercado inicial, el postre hizo que cerrara muy bien la noche, especialmente, el mousse de chocolates! combinacion de tres clases de chocolates, delicioso.La atención, no fué la mejor, una vez más, sugiero revisar, no dejar perder clientes que disfrutan de un buen plato italiano, por una mala atención!

Estaba demasiado rica la comida yo me comi una pasta y estaba deliciosa les recomiendo ir.

Ambiente familiar, buen diseño, comida italiana de buena calidad. Precios razonbles

En varias ocasiones he tenido el placer de disfrutar de una buena pasta en el punto ideal, y en salsas... que puedo decir, deliciosas! Me quedo con la entrada de almejas en salsa roja, he intentado con otras, pero definitivamente esta es la ganadora! Porción suficiente! Esta ultima vez me fui por la pasta con Mariscos, una combinación de mariscos, deliciosa. He repetido este plato, gracias a la buena recomendación que me hizo con anterioridad Eladia, una excelente waiter , servicio excepcional, quien para la ultima vez de mi visita! ya no trabajaba alli! de veras, que se ha ido un gran elemento en servicio y atención. En mi ultima experiencia el servicio estuvo bien regular, poca atención en la mesa, simplemente, fue diferente. Sin embargo le anoto un `punto más al Sr Rino! Los Ñoquis que ordeno mi esposa! Wao! en el punto! Una vez más quedamos satisfechos, sugiero atención en el servicio, el restaurante lo merece! Y de volver, por supuesto!

Hace varios años no frecuentaba este restaurante y el dia sabado regrese para asistir a un evento. Recibi una gran decepcion, ya que fui de las primeras en la fila y la comida estaba fria. La estacion tenia dos postres que estaban servidos de una forma no agradable. El pan llego tarde, los meseros se demoraban al solicitarles la bebida. Reconsideren este sitio, si desean realizar un evento para mas de 15 personas. Cuando ya se retiro parte del grupo de 30 personas, quedamos 9 en dos mesas y no ocultaron su deseo para que salieramos pronto. Ya que uno de los meseron arrastraba con gran ruido, mesas y sillas (estabamos en una terraza). Solicitamos varios capuccinos y al minuto nos llevaron la cuenta sin pedirla. El restaurante estaba lleno adentro y empezaron a bajar las luces, ademas de la incomodidad de que cada cinco minutos se asomaba su cabeza el capitan de meseros desde la puerta. Vayan, si desean reunirse en un lugar bonito y agradable pero sacrificando el gusto de la comida y el servicio a un precio "razonable".