Patagonia

El servicio fue excelente, un camarero muy atento... De entrada pedimos unos langostinos con cognac fabulosos, lo mejor de la noche... Luego pedimos dos cortes para compartir rib eye y entraña, estaban buenas mas no excelentes... En términos generales fue una comida muy agradable.

Fuimos a celebrar la boda civil de mi sobrina la comida estaba buena, la atención y el servicio regular. Mi esposo y yo pedimos una parrillada bien cocida y la trajeron 1/2, de guarnición un mil hojas de papas que estaba buena. El restaurante es acogedor.

Lo primero que te traen es el mejor pan de Panamá con un cuchillo enterrado, para que sepas que la cosa es seria. El mesero que nos tocó era toff, pero iba con el lugar y era eficiente. Traía lo que tenía ue traer cuando había que traerlo y eso es suficiente. todos los meseros se veían igualea, como que no andan con ahuevasones. Pedí una entraña de 16 oz y mi esposa pidió un bifecito de chorizo, ambos acompañados de papas mil hojas, Aparte pedimos una ensalada de tomates y cebolla a la parrilla. La comida llegó y comimos en total silencio. Era comida sagrada y todo mi cuerpo era una ovación de pié mientras comía. La ensalada a la parrilla era perfecta para la carne y me baje todo eso con una Quilmes. Terminamos con un café cortaíto. Eso, eso fué cerrar con broche de oro una cena perfecta.

Fui por primera vez, fue el día del padre, obviamente estaba full pedí un super Ribe, y fue la decepción porque debido al grosor lo dejaron cocinar muuucho y estaba Super dura, pero del resto la entraña buena y los demás platos Buenos, el pan de la casa esta rico. Ya se que la próxima no pediré ese corte. Otra cosa, en la parte de atrás hacia un calor fatal, el aire como que no llega hasta esa área, y la atención bueno muy poco personal, para todo el trabajo que había, así que no culpo a los saloneros.

Muy buen ambiente y los cortes de carne son deliciosos; totalmemte recomendado para ir a cenar con la familia o amigos