P.F. Chang's.

La franquicia me encanta y las dos veces anteriores que he visitado el restaurante en Panamá han sido buenas experiencias. En esta última visita, en un restaurante 20% lleno con numerosos meseros, recibimos una atención pésima. Teníamos 6 meseros frente a nosotros y ninguno venía a la mesa; cuando los llamábamos se hablaban entre ellos a ver cuál venía porque ninguno tenía la iniciativa. Pedimos los dumplings de cerdo que estaban malos y el Chang's Spicy Chicken que estaba normal. Este plato me gusta mucho pero en esta ocasión pareció que lo hicieron de mala gana porque ambos salimos decepcionados. Espero que no se confíen de la fama de la franquicia y mejoren su atención y calidad.

Desde que abrió, pasa completamente lleno así que hay que llegar temprano. Solamente dejan reservar en ciertas zonas así que si es posible, recomiendo lo hagan. Entre los platos pedidos fueron: Mongolian Beef: estaba rico pero en la inauguración lo sentí mejor, Changs Spicy Chicken: lo sentí igual que el caso del Mongolian, Green Beans: le gustaron a los comensales, a mí ese plato nunca me ha encantado, Salt & Pepper Shrimp: estaban bastante ricos, Wantones de Cangrejo: estuvieron mejores en esta velada que en la inauguración. La atención muy regular, olvidaban las bebidas, costaba ubicar a la mesera. Nos trajeron un plato equivocado que lo regalaron por ser falla de ellos; me pareció un buen detalle pero las mesas son tan pequeñas que estorba tener tantos platos. Las porciones son amplias, con precio/cantidad muy atractivo e ideales para compartir. La acústica del lugar no es buena, se escucha demasiado ruido y hay que gritar para poder conversar. Lo recomiendo para variar de sitios, comer algo rico a buenos precios con grupo de personas.

Un lugar grande, cómodo, bien ubicado. La atención fue excelente, inclusive estando en una sección donde no había más nadie. La comida que pedimos muy rica, con su sabor picante asiatico. En general una muy buena experiencia para una franquicia.

No puedo decir que salí impresionado con el menú lunch. Mucho arroz para tan poco que sirven de carnes (el famoso cuarto de helado en la nevera de las oficinas me vino a la mente) y además muy seco ese arroz. Recomiendo mejor pedir los platos normales y compartir. El resto de la experiencia nada del otro mundo tampoco.

No suelo variar mucho lo que pedimos aqui ya que las opciones GF son buenas. No me gustó que quitaron uno de mis platos favoritos del menú pero ni modo, hay que mantener lo que tiene rotación y lo demas se va. Al principio la atención fue como si nos hubieramos sentado en la banca de un parque, asi que nos cambiamos de área y ahi todo mejor.