Masala

La ultima vez hubo mucho calor, es muy pequeno el espacio para comer y no hay donde estacionar, la comida esta ok y lo precios no estan mal

Dos ambientes a escoger entre sentarse en cojines o mesas, una gran variedad de platos, probé un pollo con una salsa a base de yogurt y pepitas de marañon con arroz de azafrán, ambos deliciosos. Atención súper rápida y personalizada.

La comida salva al lugar y el servicio. Un rincón hindú netamente transaccional donde comer bien es el goal del establecimiento, más no que te lleves una "experiencia". Servicio al cliente no es el forte de este rest. Sin embargo, la comida y calidad en la preparación de los alimentos es excepcional!

Toda una experiencia hindú! Es un pequeño local, q te la piensas antes de entrar! Pero es muy muy bueno!! Fuimos un grupo grande y nos instalamos en las mesas q están sentados sobre cojines con telas de la India y un ambiente muy acogedor. La comida es deliciosa!! Los nombres no los recuerdo, pero sí lo q tenían. Tomamos una bebida q tenía yogurt y mango, muy rica. De entrada pedimos las somosas de cordero: deliciosas y le podías poner salsa de mango, de coco, de menta o picante. De platos fuertes pedimos unas cazuelas de pollos, res y cordero y el acompañamiento era arroz o también podía ser nan, q es como un pan pita, pero de mejor sabor y contextura y el de ajo es delicioso! El nivel de picante va de 1-5. Un 2 queda bien, para quienes no tenemos costumbre de picante. De postre pedimos el helado de albahaca y unas bolitas de queso con un almíbar, exquisito!! Toda una experiencia, q sin duda volvería a repetir!!

La comida de este restaurante estaba excelente. Recomiendo aprovechar la experiencia de comer en las almohadas en el piso. La atención estuvo un poco lenta y no tienen muchos estacionamientos, pero vale la pena ir.