Maguro

El concepto de Maguro es fantastico pero aun quedan muchas cosas que ajustar. el servicio lo intenta pero falta mejorar. La cocina te sorprende con propuestas excelentes y te decepcionas con platos muy regulares. El ambiente es muy bueno.

Fuimos para una cena de aniversario. La chica que nos recibió nos atendió muy bien. La comida estuvo excelente. Fue muy divertido ya que cocinas tu propia comida lo que hace bastante interactivo.

Llegamos a tiempo para nuestra reserva y lastimosamente demoraron 25 minutos en conseguirnos mesa. Ya sentados toco esperar 20 minutos para que llegaran las bebidas ni siquiera agua nos llego antes de eso. Nuestra mesera hizo un buen trabajo pero se nota la falta de conocimiento del concepto del restaurante y de los platos. El concepto de comida es muy divertido si tienes una mesa con parrilla en la cual tu mismo te cocinas tu comida. Las porciones son medianas así que recomiendo pedir entrada y plato fuerte. Pedimos el trio kimchi que estaba bueno especialmente el repollo ademas los edamame que estaban normales. Lo malo es que trajeron las entradas y platos fuertes todos al mismo tiempo es mas pedimos los hongos de acompañantes y llegaron antes que las entradas. Los hongos estaban muy buenos. De plato fuerte el prime beef bastante bueno cortes delgados que facilitan su cocción, el puerco que también pedimos estaba muy bueno pero hay que abrirlo estilo mariposa para que se cocine bien por dentro ya que el corte era muy grueso y se quemaba por fuera antes de estar listo por dentro. De postre el tiramisu nos pareció que estaba bueno. La música estaba un poco alta y extraña para el concepto (salsa de antaño) eso podría mejorar mucho, si notamos bastantes asiáticos como clientes lo cual es buen indicio en un restaurante Japonés. Definitivamente volveremos en unas semanas para ver si han superado los problemas que tienen ya que me parece son porque están recién abiertos.

La primera vez que fui , las carnes no estaban sazonadas, se pegaba al grill (tampoco tenía aceite) , nos dañó un plato de carne ya que todo se pegaba.... el servicio malo, todoooooo es lento, cometen muchos errores , se quedan parados y no prestan atención, traen las salsas después de que nuestra comida ya había sido cocida, se nos enfrió un poco la carne , a cada rato teníamos que pedir agua por que no venían a hacer refill automáticamente. Ok, voy por segunda vez , esta vez si escucharon sugerencias de que debería o ponerle aceite a la carne o al grill, usualmente debe ser al grill. Pero.... le pusieron sal y pimienta a todos los cortes y súper súper salado , el a5 despedazaba solito, de ser 6 piezas completas , quedaron 3 dañadas y 3 completas. El servicio , peor que el primer día..... la mesera lenta y nunca traía todo lo que pedíamos , Se le olvidaban las cosas. El lugar bonito , el seguridad es amigable , pero todo lo demás bleh.

Si no consigues mesa con el grill, no podras probar la mitad del menu, asi que asegurate de reservar una mesa "con", si deseas probar ese estilo, ya que hay muchas otras mesas "sin". El edamame que nos llego estaba sobre hervido, pero los dumplings de wagyu y langosta estan bien logrados con un delicado sabor. Los wraps de centollo, que nos aseguraron no era sintetico, acusan un sabor muy tenue por lo que la salsa ponzu es mas que necesaria para disfrutarlos. Probamos varios yakitoris y el que destaco fue el de wagyu. No hay fideos frios Soba, pero el que ordenamos (con cerdo) estuvo muy bueno. El tempura de mariscos estuvo excelente y ademas viene con varias piezas de vegetales. Merece la pena probar el soufle de huevo, que no es facil de conseguir, a falta de nuez ginko, estuvo muy bien. De postre el tiramisu es un exito total. Sustituyen el polvo de cocoa por matcha, y esta genial. El restaurante no ha cambiado mucho en terminos de estetica y el dia que fuimos habia muchos clientes, por lo que no logramos una mesa con grill y el servicio, aunque cortes, fue muy por debajo de lo esperado. Tienen una gran oferta de cerveza, sake y whisky japoneses, ademas de una amplia barra con licores, vinos y espumosos. Ah! Una ultima nota. Este es uno de esos restaurantes que aplican 7% de itbms a los alimentos y bebidas mientras cargan 10% a las bebidas alcoholicas. Un disparate completo. Me pregunto si ese 3% adicional realmente termina en el tesoro nacional o no.