Madero

Cuentan con un menú bien variado y para todos los gustos. Las pastas, las carnes, las hamburguesas, los emparedados son deliciosos. He visitado el restaurante en varias ocasiones ya sea con amigos, familiares para reunión de negocios y siempre hemos contado con una buena atención. Por el lado de los estacionamientos, además de los que están ubicados frente a la entrada principal, cuentan con un amplia área bajo techo para el mismo fin.

Tuve una reunión de trabajo y ordenamos hamburguesas. La mía era la de ron abuelo (Recomendadísima). La prepararon tal cual la ordené: bien cocida y el camote crunchy. Acerca del servicio: Excelente atención ya que todo fue tal cual, lo que uno como cliente espera recibir (esperan el tiempo prudente para que el cliente revise el menú, entregan la orden tal cual se les pide, retiran los platos en su debido momento). Serán cosas básicas, pero no todos los restaurantes suelen hacerlas. Importante: Cuentan con estacionamiento bajo techo también, y tienen rampa para handicaps y elevador.

Muy mala nuestra experiencia, fui a un almuerzo con unos clientes, ellos fueron los que seleccionaron el lugar, la verdad nunca había venido no me llamaba la atención y con toda razón. El almuerzo fue fatal, desde las entradas pasando por los platos fuertes y las bebidas. El pescado con mariscos le cayó mal a mi amiga, el pollo a la plancha sin sabor, el pulpo a la parrilla estaba solo cocido sin gracia y lo peor de todooooo fue el churrasco que llego como carne sancochada con guiso y llena de pellejos muy desagradables, mi clienta intentó comérselo pero que va. Al final nos quejamos y se lo cambiaron pero ya con la mala experiencia no fue capaz de almorzar. Nadie quiso ni café ni postre solo queríamos salir y olvidar este almuerzo. Debut y despedida.

Excelente atención desde el anfitrión hasta el chico que nos atendió (Ariel) amable, divertido y eficiente, los wantones de camarones 🍤 estaban bien ricos, el pulpo 🐙 al carbón tenía un buen sabor, el caldo gallego estuvo bien, los langostinos en maracuya tenían algo extraño en el sabor, el filete de pescado estaba bien nutrido no como los de otros lugares que parecen lascas de filete … un lugar muy acogedor, tranquilo, céntrico, espacioso y recomendado.

Fuimos a cenar sin conocer, lo primero que me gusto fue el estacionamiento:), el ambiente muy agradable y a pesar de que estaba lleno, es tan amplio que no se sentía. Un menú variado y para todos los gustos. El risotto negro con camarones estuvo súper, mi filete rebanado vino en trozos pero bien, el servicio muy atento. Regresaré para desayuno.