Los Tarascos (Bella Vista)

Tenía muchas ganas de visitar los Tarascos porque me encanta la comida mexicana, fuimos de noche y nos sentamos afuera para apreciar la vista; para nada me gustó que no mantienen seguridad, a nuestra mesa entraron personas vendiendo chicle, rosas y hasta pidiendo plata, me sentí muy insegura. La mesera no estaba pendiente de nosotros a pesar de que no estaba lleno, la comida no me gustó al 100% creo que le faltaba sabor. No regreso

Excelente ambiente, me agrada el hecho de que tenga estacionamiento, servicio atento y comida muy bien, los precios son promedio a otros lugares de comida mexicana, quisiera probar luego más de su menú

El restaurante cierra a las 11pm. Lo cual es buen horario porque era lo que muchos restaurantes cerraban antes de covid. La comida ew muy buena, recomiendo todo lo que es al pastor con piña, no soy fan de la piña en comida pero esta vez le da un toque muy bueno.

Estuve hoy al mediodía en este restaurante y puedo decirles que es la peor experiencia que he tenido en mucho tiempo. Éramos tres personas y pedimos una entrada mixta de totopos con queso fundido y chorizo que era muy complicado comer porque los totopos estaban muy delgados y se partían haciendo imposible llevarlos a la boca. El pico de gallo no tenía ningún sabor y además estaba hecho con tomates verdes... no sé si ese es el original pero no es como lo he comido yo antes Y definitivamente que no tenía ningún sabor. Pedimos tres platos iguales que eran los tacos de maíz mixtos que traen cinco tacos... al pastor, chuleta, chorizo, pollo y carne... pero al igual que la entrada ni la proteína ni las tortillas tenían algún tipo de sazón que recordara que es un restaurante mexicano. Pero si creen que la comida es lo peor no les he hablado todavía del servicio. La atención es malísima. Me tuve que levantar dos veces la mesa a buscar al salonero para que viniera a atendernos y para pagar la cuenta también tuve que ir hasta la caja porque jamás apareció el salonero. La cuenta se la tuve que pedir a otra salonera que estaba cerca. Considero que alguien que está atendiendo mesas debe estar pendiente enel caso de que algún comensal necesitara alguna bebida más o algún plato extra u ordenar algún otro platillo pero este salonero No aparecia... de hecho trajo uno de los tres platos primero y como los tres eran iguales, para que las otras personas No se quedaran velando, decidí compartirlo y después completar cuando llegaran los otros dos platos iguales. Era tan mala la atención que tuve que preguntarle al salonero si es que él era nuevo en el local y me contestó que no. Solicité quedarme con la precuenta porque en este restaurante dividen todos los platos por ejemplo el plato de los tacos mixtos trae cinco tacos pues en la cuenta vienen uno a uno..., y como yo soy jubilado pedí el descuento del 25% de mi comida que era alrededor de $17 y el descuento aplicado fue de 76 centavos porque lo aplicaron a uno solo de los tacos de los cinco que trae el plato que muestra el menú. Pagué la cuenta en la caja pues jamás regresaron a la mesa a cobrarme y por lo menos tuvieron algo de decencia en no preguntarme si quería incluir la propina. Pregunté quién era el dueño de este restaurante para saber si lo conocía ya que tengo muchos contactos en los restaurantes de Panamá desde cuando tuve mi propio restaurante pero me negaron la información. La hora fue al mediodía y solamente había cuatro mesas ocupadas al momento de nuestra llegada. Tres mesas de dos personas una mesa de una persona y otra mesa de ocho personas. Definitivamente que este es un restaurante al que no regresaría ni regalado por su mala atención, su comida muy regular, los precios un poco altos para el tipo de comida y la deshonestidad al aplicar el descuento a los jubilados. Aparte de que es una violación a la ley Por lo cual estaré presentando mis respectivas quejas a la autoridad competente. P. D. El servicio sanitario deja mucho que desear por su limpieza e higiene Además de que la iluminación de todo el área del servicio sanitario está regulada por un temporizador o un sensor de movimiento y la luz se apaga.... uno tiene que empezar a moverse y bailar hasta que la luz decida encenderse nuevamente. En lo que me estuve lavando las manos la luz se apagó dos veces.

Engañan al consumidor diciendo que ese licuado de apio es guacamole, que tristeza que ofrecen comida mexicana sin ser auténtica. No vuelvo.