Local (San Francisco)

Fuimos por primera vez y nos encantó la estética del espacio. El servicio estuvo bien, la comida buena pero nos pareció que no iba acorde al precio ya que no sobresalían mucho los sabores y la porción muy pequeña, nada espectacular.

El ambiente me encanta porque no tienen música estridente ni alta lo que permite conversar y comer en paz, algo que para mi es vital!. la atención es demasiado amable y atenta. Les comentaré acerca de los 3 menús que degustamos: El plato que no existe, lo probó mi hija, trae huevos revueltos, bacon y opción de pancake o wafles, mi hija optó por pancake. No le colocaron mantequilla le tocó pedirla. poco sirope para 3 grandes pancakes, pero en general le gustó. Cédula 7, me gustó todo a excepción de la changa, por dentro estaba cruda y se podía ver los granos de la mazorca. Hojaldré a caballo, lo probó mi esposo, me dió a probar de la carne y no me gustó, no parece filete y el color es desabrido, le falta un poco de sazón y color. El café exquisito.

La comida de este restaurante es tan creativa, con platos com excelente porción y calidad-precio. Es pet friendly así que ya con eso se ganaron mi corazón. Muy buena atención.

probamos el risotto de guandú con plátano tentación y estaba delicioso. el choripán también estaba sabroso. la atención es muy buena están súper pendientes de todo. lo único que no es tan agradable es sentarse afuera por el calor.

algo diferente un día diferente en un lugar diferente wrap de pollo con papas curly. bajo excelente atención y buen ambiente. las papas nada que pedir y el e wrap nutrido con un rico pollo.