Nos encantó La tapa del coco. El servicio muy atento y servicial, y la comida muy muy buena. Eramos 4 y compartimos todo (chicharrón de pork belly, patacones, torrejas de bacalao, one pot colonense, meloso de pulpo, buttermilk chicken tenders y el postre cacao). Nuestra única queja: el servicio del bar excesivamente demorado. Por el contrario, la comida salió rapidÃsimo...
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Platos recomendados
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Precio por persona de: Entrada + Plato principal + bebida SIN ALCOHOL
Precio = Entrada + PLato principal + Bebida
El ambiente es agradable. El servicio puede mejorar con detalles como ofrecer agua. El punto fuerte sin duda lo fue la comida. Todo estuvo muy bueno. La hamburguesa excelente y las almejas también . La salsas que tienen junto con las torrejitas muy buenas Recomendado
La Tapa del Coco es un restaurante en el corazón de la Ciudad de Panamá que se ha convertido en un referente de la gastronomÃa afropanameña, destacándose por su compromiso con rescatar y celebrar las tradiciones culinarias afroantillanas y afrocoloniales. Este lugar, liderado por el chef Isaac Villaverde, ofrece una experiencia única que combina sabores auténticos con un toque moderno, todo en un ambiente casual y vibrante que refleja la riqueza cultural de Panamá. Uno de los platos más destacados de su menú es "The Panacake", un postre que no solo deleita el paladar, sino que también despierta recuerdos y emociones, y es una colaboración con la repostera Jenny Ho de Delicatesse Postres. Este pancake de 8 oz, ideal para compartir entre dos personas, es una explosión de sabores y texturas que lo hacen inolvidable. Su base es suave, húmeda y esponjosa, pero lo que realmente lo eleva es la combinación de elementos como el sabor rojo del raspao, el crujiente del mafá, una crema de limón sublime y el dulce contraste de la leche condensada y la malteada. Cada bocado juega con lo dulce, lo ácido y lo crocante, creando una experiencia que te transporta a la infancia, como si revivieras esos momentos simples y felices de la niñez. Además, viene con una variedad de toppings que invitan a personalizarlo a tu gusto, añadiendo un toque divertido y festivo. Se puede pedir directamente en el restaurante o a través de su página web, e incluso ofrecen una versión más grande de 6" con solicitud previa. Más allá del Panacake, La Tapa del Coco brilla por platos como el One Pot Colonense o las torrejitas de bacalao, que resaltan la herencia caribeña con ingredientes frescos y sazones llenas de carácter. En resumen, La Tapa del Coco es mucho más que un restaurante: es un homenaje a la cultura afropanameña, y "The Panacake" es la estrella dulce que corona esta experiencia. Si buscas sabores que cuenten historias y un postre que te haga sonreÃr con cada cucharada, este lugar es una parada obligada.
Fui por recomendación de unos amigos y realmente mis expectativas eran más altas de lo que recibÃ. un sábado después del medio dÃa cuando se supone que la marea o ola de gente ya ha bajado. el servicio es lento y siento que se tiran de divos los meseros. lo que pedà no estaba tan apetitoso: mero al horno, tenÃa diferentes olores y colores. llame al mesero y le pregunté y me insistió que eso era lo que sirven y trae el plato. después de colocarle limón y picante me lo terminé comiendo. no fue mi favorito y no lo repito más. lo que sà está wow es el arroz con frijoles. los patacones también súper buenos. las bebidas ok. pedà una limonada. regresaré para darle otra probada.
Es un restaurante con un servicio excepcional, la comida deliciosa y un ambiente bastante cómodo y acogedor. Aunque a la hora de comer se habla de la comida, en esta oportunidad, la diferencia, el punto extraordinario fue el servicio. Personal muy atento y capacitado desde la entrada con el valet hasta cada uno del personal de sala. Muy atentos, muy amables y muy correctos. 100 puntos en servicio. La comida con excelente sabor y buenas porciones. La combinación perfecta de las cocinas afroantillana y panameña. La torrejitas de bacalao están a otro nivel y el One Pot es muy bueno. Son de sus platos insignias y no hay duda del porqué. Los dos platillos fueron para compartir y las cantidades eran ideales. De bebidas pedimos limón con raspadura y saril con jengibre. Muy particulares y muy buenos.
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