La Locanda (Obarrio)

Es un lugar agradable, la atención es buena pero nada del otro mundo ya que se llena bastante. De entrada pedimos un carpaccio de portobelo. Básicamente finas rodajas de hongos con queso gratinado, aceite de oliva y un toque de limón (muy interesante). De plato fuerte pedimos una pasta carbonara y una pst larga con langostinos. Dentro de todo bien pero la salsa blanca un poco insípida, para mi gusto. Acompañamos nuestro almuerzo con un vino blanco Sauvignon Blanc. No podíamos dejar pasar la visita sin probar el Tiramisú, estuvo decente pero no lo sentí tan fresco. Es un buen lugar para un domingo en familia.

Fui esta semana almorzar y me parecio muy bueno!!! No conocia, y la comida me gusto mucho. Ademas la atencion excelente, muy agradable el chico que nos atendio. Seguro que vuelvo¡!¡

Las porciones de comida son bastante, teníamos mucha hambre así que pedimos varias entradas , no sé si también sería por eso , pero casi todos pusimos comida para llevar , yo pedí una lagsaña y estaba muy bien ,

Otra pizzeria de moda, pero nada mas. La comida es tan comun que es dificil identificar si estas en uno u otro lugar italiano. La pizza es regular, la masa muy dura, la pasta con camarones y vegetales sin sal. El salmon, grasoso y con sabor a residuos de la plancha. Se demoraron 25 minutos en servir cosas asi de sencillas. Seguramente la cantidad de personas no ayudo. Rescatable la decoracion, pero el aire acondicionado es muy frio.

He ido ya 4 ocasiones a este restaurante.. Las pastas son muy ricas pero no recomendaría la salsa roja ya que no me pareció natural e incluso en la ocasión que lo pedí, una de mis compañeras concordó conmigo.. de resto, las salsas pestos y al óleo si me parecieron naturales y muy ricas.. el servicio en general estaba bien solamente que en ocasiones han sido demasiado atentos ofreciendo lo mismo varias veces y en otras ocasiones no han sido tan atentos ya que por ejemplo en la última ocasión llegamos mi esposo, mi bebé y yo y el muchacho en vez de traernos u ofrecernos la silla para bebé inmediatamente empezó a preguntar la cantidad de personas y a acomodar los platos y menús por lo que tuvimos que pedirle la silla a otro muchacho.. el ambiente muy familiar