El Republicano

Restaurante-Bar con muy buena ubicación, las hamburguesas me parecieron buenas, buen sabor, algo elevadas en precio pero regresaría nuevamente a probar algo diferente, tienen un área abierta en la parte de arriba super cool, Lo recomiendo

No puedo decir otra cosa más que las hamburguesas están A OTRO NIVEL!! la emperatriz y la gobernaitor mejores imposibles,sabores, condimentos,cocción,presentación y mucha calidad en los productos 100% recomendadas

Me gustó como restaurante para ir con amigos a cenar y conversar, no tanto del estilo de ir a parkear porque a mí me parecer es tranquilo, eso si la comida está BUENÍSIMA! Probamos las Costillotas que estaban en un término jugoso y con la salsa en que la bañan riquísima, pan de maíz, chicharrón y pork and beans vaya combinación! Por el lado de las hamburguesas probamos la Goberneitor con hongos súper rica, la emperatriz que trae como una capa de arroz crispy es toda una experiencia y la Embajadora que está requetebuena con el queso que trae la Mayo de Sriracha, hongos y cebolla crispy! vaya manera ! Por el lado de las cervezas artesanales, no sé si fue porque fuimos en noche de viernes pero no habían muchas opciones aunque probamos dos de la casa que estaban buenas ! Conclusión Recomendado ! 🔝🔝🔝💯

Este restaurante tienen buena fama por sus hamburguesas, sin embargo, la experiencia no logra superar la comida. Aparte que el aviso externo no es fácil de ubicar y la casa pasa desapercibida. Una casa con 4 mesas, ya se cataloga como restaurante y los precios son los mismos que pagarías en cualquier ciudad cosmopolita del mundo, lo cual es absurdo. El servicio no es el mejor y la disponibilidad de producto mucho menos, no tenían 3 tipos de sus cervezas artesanales, no venden vino, no venden café, el agua con gas está al tiempo, etc etc. Realmente, si buscas una buena experiencia, y buena comida al mismo tiempo, este no es el lugar.

Muy regular la ambientación, la música altísimo volumen para el sitio. Fuertes olores a humedad en una casa que se nota fue adecuada con poco presupuesto para volverse un restaurante que más pasa por bar que por otra cosa. Pese a los intentos de la mal presentada waitress, en más de 4 ocasiones dijo que no había ni de la cerveza que nos había ofrecido, ni de los platos ordenados. Mucho menos pedir café ya que No venden. Lastimosamente una experiencia que poco o nada deja que desear más allá de haber pagado precios altísimos por un ambiente, comida y atención que no lo merecen.