El Faro de Casco Antiguo

Excelente lugar pero no es el casco antiguo para tener esos precios!. Debería mejorar ese aspecto ya que seria agradable que fuera más razonable el precio no cayendo en lo económico porque no no es el concepto

Ha sido la peor experiencia que he tenido en un restaurante. Voy a contar mi historia y espero que las personas se tomen el tiempo de leerlo para evitarse la pena de pasar por un momento tan incómodo y desagradable como el que yo tuve que pasar y aguantar porque definitivamente es un patrón que tienen. El día martes 11 de junio del presente año a las 8 de la noche me dirigí al piso 27 del PH Bay View para hacer una reservación en el restaurante El Faro, ya que quería celebrar mi cumpleaños haciendo una cena familiar el día viernes 14 de junio. Acompañada por mi hermano, le pregunté a un mesero (que era el único que se encontraba disponible en ese momento) para que me orientara sobre las reservaciones y con quién debía hablar. El señor buscó a una muchacha quien me preguntó para cuantas personas era y etc. Finalmente hice mi “reservación” y solicité la mesa que quería. Estuve esperando como por 30 minutos sentada con mi hermano hasta que se acerca nuevamente el mismo mesero que me atendió al principio y me pregunta si se me ofrecía algo más y le dije que solo era la reservación, a lo que me contest que ya la reservación estaba hecha para el día viernes 14 de junio a las 9 p.m. Le dijimos que muchas gracias y nos retiramos y por cierto no volvimos a ver más a la otra muchacha. El viernes, cuando me dirijo al restaurante para la cena en el lugar que reservé, nos dicen que no hay ninguna reservación a mi nombre. Sin embargo la mesa no estaba ocupada, aunque no estaba arreglada (no tenía ni cubiertos, ni copas ni absolutamente nada como las demás mesas). A pesar de esto tomé la decisión de quedarme puesto que la mesa estaba desocupada y solo pedí que la arreglaran Porfavor. Pasó aproximadamente media hora para que finalmente llegaran a “acomodarla”. La falta de empatía que se podía sentir era demasiado grande, sabiendo que era mi cumpleaños y que estaban concientes de que yo había hecho la reservación (pues ese día nos atendió el mismo mesero que me orientó con la reservación y que me dijo que ya estaba hecha). En cuanto a la comida exageradamente cara y las porciones son miserables, ni un niño con 10 años se logra sentir ligeramente satisfecho. Cabe resaltar que NUNCA se acercaron para ofrecer alguna cortesía de cumpleaños ni nada por el estilo, muy por el contrario nos cobraron a cada uno $7 dólares que eran obligatorios para un “shot de bienvenida” del cual nunca nos dijeron absolutamente NADA. Pero esto no es lo peor de la historia…. El día jueves 13 de junio, yo también había ido pero ahora con mi mamá para hacer la reservación en el Roof del Faro, ya que quería celebrar mi cumpleaños con amigos. Pues igualmente hice la reservación y la muchacha que me atendió anotó TODOS mis datos en su tablet enfrente de mi y de mi mamá. La reservación la hice para el sábado 15 de junio, igualmente a las 9 p.m. Cabe resaltar que también había escrito por WhatsApp y que la misma muchacha estaba consciente de que era yo la que había escrito porque me lo dijo cuando fui a hacer la reservación en persona. Llego el sábado y cuando subo nuevamente la misma muchacha que me había hecho la reservación me pregunta si tengo reservación y le digo que sí. Le doy mi nombre y me dice que pase, que sí estaba la reservación. Nuevamente nos cobraron a todos los $7 dólares del supuesto “shot de bienvenida” (un completo robo). Cuando subo al área VIP que es donde yo había hecho mi reservación me doy cuenta que ya esta ocupada por otras personas. Bajo con mis amigos y le digo a la muchacha que ya esta ocupada la zona que reservé. Muy descaradamente busca su tablet y me dice que no encuentra ninguna reservación a mi nombre (cuando previamente me había dicho que sí enfrente de mis amigos). La cosa se fue de mentira tras mentira, porque luego me dice que si había hecho la reservación pero para el 16 de junio y que era error de ella. Le pedí hablar con su supervisora ya que quería mi dinero de regreso. Fue a buscar a la supervisora y esa Señora fue demasiado pero demasiado grosera, simplemente me trató como si fuera imbecil haciéndome y repitiéndome las mismas preguntas que ya me había hecho una y otra vez y su solución era darme una “cortesía de la casa” (la cual nunca me dijeron qué era). Después del mal trato de la supervisora traté de encontrar otro lugar a pesar de que no era lo que yo quería y espere para que me dijeran cual sería la cortesía, ya que de eso dependía que yo me quedara o no. Después de esperar aprox 45 minutos, en los que nunca llegaron los shot de bienvenida que ya estaban pagos y en los que nunca se acercaron para decirme cual sería la grandísima cortesía por su doble error dos noches seguidas, simplemente decidí solicitar mi dinero y el de mis amigos de regreso. La hostilidad con la que me hablaban es indescriptible. Antes de devolverme mi dinero se acerca la supervisora para preguntarme si yo era huésped del PH, y le dije que si, a lo que me responde que una disculpa de parte del faro y me siguió inventando una serie de cosas sin nada de sentido. Que ellos tenían que pedirle a la gente que se moviera a esa zona ya que estaba lloviendo (cuando NO estaba lloviendo ese día y además esa zona tampoco era techada asique era una total incongruencia). El trato es pésimo, la comida es pésima ya que anteriormente había comido en el Roof también y no hay relación calidad precio. Se de otras personas que les ocurrió lo mismo y al parecer ellos están acostumbrados a tratar así a las personas. No tienen ni un poco de humildad o empatía, y para todo esto sabían que la celebración era por mi cumpleaños y no les importó nada. Espero en verdad que nadie más tenga que pasar por lo que pasé y menos en un día importante, no recomiendo para nada este lugar y es la opinión más sincera que podrán leer en los reviews, ya que me ocurrió dos veces seguidas. Por cierto, la música en vivo es pésima, escandaloso que no se puede ni conversar y para nada un ambiente juvenil. Adjunto pruebas de que al siguiente día me llega una notificación a mi correo de que no asistí a mi reservación para el día 15 de junio. Es decir, las mentiras fueron tantas que solo puede decir que todo ahí es pésimo.

La comida que ofrece el sitio no hace Justicia a la Vista panorámica que poseen, el servicio por parte de los meseros es razonable pero podrían ofrecer mucho mas. En lo personal vi y sentí por parte del staff de recibida que son muy clasistas pues eligen si eres de reserva o no y te colocan en lugares poco agradables con vistas hacia la 5 de mayo o albrook a pesar que alrededor habían mas de 8 mesas con mejor vistas hacia skyline de la cuidad y vacias pasamos casi 1 hora y media y jamás llego alguien a ocuparlas. También habían extranjeros en otras mesas y la chica de recepción iba personalmente atenderles a ellos y preguntarles si todo marchaba bien sin embargo a nuestra mesa jamás llego a preguntarnos si nos ofrecían agua o algo en particular, ahhhh que dicho sea de paso no te brindan agua te obligan a comprarla embotellada, las cervezas cuestan $5 balboas y los tragos de $7.5 hacia arriba. También vimos que el servicio de descorche a los invitados como equivale un precio adicional si logran cantar cumpleaños u ofrecerles un servicio mas personalizado, el valet parking espantoso malos olores a aguas negros como se encuentra en sótano no posee ventilación, el señor de los elevadores me parece de buen porte amable y cortes. Los camarones al ajillo son asquerosos ni pareceido a los camarones que ofrece nuestra cultura caribeña panameña, las hamburguesas son caras y pesimamente mal preparadas, no posee un menú amplio ya que el sitio parece ofrecer solo un lugar de ir a beber y no familiar. Ojala en algún momento este restaurante pase a mejores administradores u otra franquicia de renombre ya que los que tienen no visualizan en ofrecer un servicio de excelencia.