DaFranco

El restaurante estaba lleno y aun asi todo fue rapido. La comida en sí no sorprende, la atencion es buena y rapida, el lugar es casual y sencillo.

Fui a tomar el almuerzo para el día de las Madres y a pesar de que el restaurante estaba lleno, el servicio fue bueno y rápido, el chico que nos atendió muy atento. Era mi primera vez y me gusto la comida, estaba bien relación calidad/precio. La pasta estaba en su punto, tenia buen sabor, la pizza bastante regular, volvería a probar los otros platos.

Tengo que decir que el dueño es muy amable, el mesero tambien fue muy cordial. Mi comensal pidió unos penes en fruti di mare al oleo y los mismos vinieron cargadas de mucha agua y la pasta sin sabor por lo que el dueño le trajo sin costo adicional unas papas fritas con pechuga a la plancha. Yo pedi un res al cartuccio el cual habia pedido bien cocido pero vino 3/4, luego que me trajeron la res habia sido calentada en microonda, no quise ser odioso por lo que no reclame mas. Hay puntos a mejorar dentro de la cocina

Fuimos 3 personas. Mi pizza estaba buena, pero nada diferente o que me invite a volver. Los meseros bastante indiferentes y que se les olvidaba lo que pedíamos y una de las muchachas hasta con mala cara. Tuvimos un experiencia no digamos que desagradable pero sí determinante para saber cuando uno no le gustaría volver al lugar: una imitación de jalea de mariscos con un apanado que era 3 a 1 en masa versus el marisco adentro que se deshacía y que se le caía al agarrarlo y una pasta de langostinos con 2 camarones grandes y que por casi 20 dólares dieron ganas de llorar. El dueño o gerente se portó muy caballerosamente pero lamentablemente esto no da remedio a un lugar italiano que no nos gustó a ninguno.

Excelente la comida, buena atención y agradable ambiente para compartir con familia y amigos, hermosa la terraza para tomar un par de vino con quesos