DaFranco

Este restaurante me encanta. Las veces que pueda ir voy. El servicio es excelente y la comida, muy buena. Siempre pido algo diferente, pero mi plato son los fettuccine con langostinos al óleo, con tomate cherries y espárragos. Muy bueno, esta vez se le fueron la mano en aceite de oliva, pero nada que no se pueda remediar. También pedimos carpaccio de res, una copa de vino pinot grigo para acompañarlos. De postre pedimos un pie de limón, a mi esposo le encanta y comentó que estaba muy bueno. Definitivo que lo recomendaría sin duda alguna.

Es la segunda ocasión que voy. La primera visita me pareció mejor q está. Tienen una buena carta de vinos. Fui acompañada de dos comensales más, uno de ellos pidió una sopa de minestrone, tenía más frijoles que pasta, muy líquida, a diferencia de otras q he probado. Un carpaccio di manso que estuvo muy bueno. Pedí unos lingüini con langostinos y tomates cherry, estaban un poco duro, no al dente. Mi esposo pidió una ensalada con camarones y pidió q le agregarán extra de pollo, nunca se lo agregaron y tuvimos q devolverlos.

Me lo habían recomendado y no había tenido la oportunidad de visitarlo. Compartí con otra pareja y mi esposo. El lugar muy acogedor, el plato que pedimos estuvo muy bueno.

Buen servicio por parte del salonero que nos atendió, muy amable y atento al pedido, pedí un jugo de maracuya frozen, de entrada un carpaccio de res, como plato fuerte raviolis de ricotta y espinaca en salsa pomodoro que lamentablemente me los llevaron mas que al dente los regresé y ya la segunda vez si estaban bien y súper ricos.

El lugar cuenta con una terraza que es su principal atracción. Definitivamente su especialidad es la pasta. La sangría exquisita. Es un restaurante muy ameno en que vale la pena sentarse a comer y pasar un buen rato.