DaFranco

Fui por San Valentín con mi novio y debo decir que toda la comida estuvo espectacular, pedimos una entradas de bruschetas y estuvieron riquísimos. La milaneasa estuvo deliciosa pero la estrella de la noche fue la Lasagna de pollo en salsa blanca, simplemente la mejor Lasagna que he probado. En contra diré que tenían un mal ambiente en terraza, música muy alta y que no tenía sentido la música con la ocasión, adicionalmente no tenía agua de grifo, tuvimos que pagar por agua embotellada lo que en Panamá se me hace inaceptable.

Arañitas fritas bueno Croqueta bacalao algo salado pero bueno Burrata muy bueno Polpettines muy bueno Arancini muy bueno Langostinos muy bueno Filete de res muy bueno Chuleta cordero muy bueno Polpetine con spaguetty muy bueno Salmon muy bueno Papas asada al romero bueno Spaguetty ok Tiramisu muy bueno pero algo dulce Zuccoto muy bueno Café americano bueno Capuchino bueno

La comida riquísima, me gustaron mucho las entradas que nos recomendó el dueño que por cierto fue súper atento con nosotros, los meseros no estaban muy al pendiente de la atención de la mesas, el lugar tiene un buen ambiente y ameno. A mis hijos les encanto y pidieron volver, cuentan con valet parking.

Nada especial comparado con muchos otros restaurantes en Panamá. Dafranco cuenta con una amplia terraza y el restaurante podría sacar mejor ventaja de su ambiente. sin embargo fuimos en un día da alto tráfico para San Valentín y la experiencia fue pésima. el servicio lento y algunos comensales nunca les llegó su plato. la comida no está mal. pero es poco original y nada fuera de lo tradicional que consigues en otros restaurantes con un menú más variado.

La verdad iba con altas expectativas pero no fueron cumplidas para empezar no habían mojitos les faltaba algo, las brochetas 3/5, los ravioles de carne duros, a la carne le faltaba sabor, el cartocho de res, la salsa tenía buen sabor pero la carne si ninguno, la pasta salvo la noche, en vista de esto preferimos ir a tomar café y postre en otro lugar