lugar acogedor, servicio amable y comida muy buena, con gran variedad de platos en la carta. recomiendo de entrada las pizzas, de plato fuerte el rissotto negro o los conchigliones a la pastora. de postre no dejen de probar la pnacota con miel trufada
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Platos recomendados
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Precio por persona de: Entrada + Plato principal + bebida SIN ALCOHOL
Precio = Entrada + PLato principal + Bebida
sitio lindo con buena comida cuyo servicio pudiera ser mejor. La primera vez que fuimos fue mucho mejor. lastimosamente el servicio ha desmejorado, pero la comida segun su especialidad buena. Comi una pasta a la Matricciana riquisima Mi esposo escogió un filete con gorgonzola acompañado de polenta, que estaba muy bueno. Espero que mejore el servicio sobre todo en rapidez y cordialidad.
Me encantó. Lo conocí por recomendación de una buena amiga. Y todo fue excelente. Desde el carpaccio, la focaccia y las tres pastas diferentes que comimos. Yo pedi la mediterránea y estaba suculenta. Mis compañeros pidieron unos raviolis trufados y unos “caracoles” con hongos porccini y toque trufado. Los cocteles excelentes en presentación y sabor. Pedimos el Madona. La arquitectura y la decoración me encantaron. Parece un lugar en New York. Hasta la música era estupenda. Asi que el ambiente acompañó una excelente cena. Gracias. Volveremos!
Un nuevo amigo nos recomendó Casa Stizzoli y ya será nuestro mejor amigo. Excelente restaurante con un ambiente y menú parecidos a sus homólogos en Europa o EEUU. Los tragos son de buen tamaño y bien preparados con excelente variedad. Para entradas, ordenamos una pizza con mortadella y pistachos que era muy inusual y deliciosa. También compartimos una ensalada de kale con queso parmesano (el auténtico parmagiano) que era la ensalada más rica que habíamos comido en mucho tiempo. Ordené la pasta en forma de sacacorcho con salsa de cordero (fusilloni al ragù di agnelo). Llegó perfectamente al dente y con un sabor exquisito. Mis compañeros ordenaron una milanesa de pollo y un bistec con queso azul (filete de manzo al gorgonzola). Los dos platos eran deliciosos. Lo único malo de toda la noche fue cuando llegaron los platos fuertes y se le cayó encima de mi amigo un pedazo de la carne. Nadie le pidió disculpa por ese error aunque trajeron un poco de agua con gas para que él se pudiera limpiar la mancha.
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