Casa Catedral

Fuimos a almorzar en familia a Casa Catedral, es un lugar mágico, donde la historia y la gastronomía se juntan para brindar una experiencia envolvente. Hay dos ambientes, afuera unas 5 mesas, y adentro 16 mesas, así que puedes elegir donde deseas estar. La atención desde la entrada hasta que sales es excelente, te acompañan y hacen sentir en casa. La comida de mucha calidad, y buen sabor. Pedimos los fritos de queso, estaban crujiente y buen queso chiricano. Los langostinos Catedral, son un plato que debe probar. La entraña en su punto y crujiente papas fritas. El Salmón jugoso y delicioso, par finalizar un deliciosos postre. Lo único que no tienen agua sin gas en botella. Es un restaurante para regresar.mas de una vez.

El restaurante es super diferente, la decoración ambientado con coches antiguo muy cool. la comida bien balanceada y buenos cocktails. una opción muy buena para el que no ha ido.

el lugar es bonito y tiene buena historia, la comida estuvo buena a pesar de que los precios son elevados, muy buena atención

El pulpo estaba un poco simple. Lo demás estaba muy rico. Aunque demoraron mucho al traer la comida. Lo demás bien

Todo excelente, desde que entras te envuelve el ambiente, buenísima atención y mejor aún la comida. Totalmente recomendado, el tartar de salmón increíble.