Aya la Vida

Aya la Vida es uno de los restaurantes más nuevos y de moda en el Casco Viejo y es una experiencia como ninguna otra. Su propietario y gerente es el talentoso y bello dúo emprendedor español/argentino Nino y Geraldina, que se han convertido en estrellas brillantes de la escena gastronómica panameña con su aclamado y exitoso restaurante Santa Rita (a la vuelta de la esquina). Expertos con una verdadera pasión por la comida increíble y la hospitalidad más cálida del planeta, Aya la Vida lleva la comida panameña a un nuevo nivel sin ser pretencioso y sin la etiqueta de precio alto. El menú ha sido elaborado por un equipo de expertos chefs, encabezados por Nino, y combina una mezcla única de carne y pescado panameños, platos estilo tapas y platos convencionales con un toque especial, como los macarrones con queso y langosta. Pero si lo que te apetece es una hamburguesa, ¡también la sirven! Todos los ingredientes proceden de Panamá y la calidad es la mejor que se puede esperar. Para nuestro grupo de 9, pedimos una serie de platos de tapas, incluyendo: Patacones Camarones en salsa de curry, Pulpo Fuerto San Lorenzo, Almejas y Chorizo Tableño "Hasta la Guacha". Todo estaba absolutamente sensacional, con amplias raciones y una bonita presentación. ¡Para terminar la comida, tuvimos una deliciosa selección de postres para babear y probar (sin culpa) con el ratón de Maracuja y chocolate uno de los favoritos! La comida se sirvió con una sonrisa, de forma rápida y eficiente, y la ventaja para los que no hablan español es que nos atendieron muy bien.

El servicio es excelente, todas las personas estaban atentos a cada uno de los que estabamos alli. Si hubiera 6 estrellas se los daría. La comida excelente, quien ha dicho que nuestra gastronomía no es excelente, este restaurante lo llevan a un nivel superlativo. El ambiente es acogedor y de buen gusto.

Hice cita para San Valentín y no esperaba mucho porque usualmente esos días se llenan mucho los restaurantes y el personal no se da abasto. Acá fue distinto y estaban preparados para la ocasión. La comida estuvo excelente, pedimos entradas, plato fuerte, sangría y postre. El personal se esmeró en que la pasáramos bien y el chef supervisó personalmente cada mesa. La ubicación no es muy buena, por lo que sugiero usar Uber o valet parking ($4). La comida se trata de platos típicos panameños al estilo fusión y todo estuvo muy bueno.

Una experiencia culinaria excepcional , deliciosa comida, un servicio impecable y un ambiente acogedor. Desde el momento en que entras, te reciben con una cálida bienvenida y un personal atento que se esfuerza por hacer que tu visita sea memorable.

Una magnifica experiencia. Muy buena comida, buen y atento servicio, y un lugar agradable, amplio y muy comodo. 100% recomendable para probar cocina panameña con un toque gourmet e internacional. Que se mantenga asi.