Athanasiou (San Francisco)

Siempre hay que visitar este lugar tan especial. Esta vez probé la llamada pizza griega, me encantó! El pan con su exquisito sabor a olivo y un queso riquísimo. Como siempre que voy, lleno el lugar. Y no es para menos, es Excelente!

Desayunar en este lugar es muy agradable. Los dulces son especiales y el barista hace de tu café una experiencia maravillosa.

Y como quisimos volver, hoy regresamos a almorzar. Mejor que la primera vez! Lleno total, creo que por la calidad de las ofertas. Hoy probamos tres tipos de sandwich, dos tipos de pizza y varios postres, deliciosos! De haber posibilidades, es recomendable pensar en aumentar el espacio para mesas, o por que no?, en una sucursal, porque cada día gana mas publico. Por supuesto, el rico y lindo capuccino con que el barista nos deleito, no podía faltar!

Muy diferente a todo lo visto, creo que el sitio tiene algo especial. Muchas pizarras con información, pero hay que familiarizarse con el lugar, descubrimos tarde donde se calientan los sándwiches, la empleada podría mencionarlo. Buen lugar para seleccionar un regalo especial para los amantes de lo gourmet. Nos quedamos con deseos de volver.

Ojo, si quiere sentarse llegue antes de las 12:15 p.m. ¿Por qué? Porque estará lleno. La salida en su carro será solo por la calle colateral. Nos tomamos una sopita de lentejas sin pretensión alguna. Un juguito natural = común. Dos emparedados buenos, pero cuando llegó la hora de los postres uno no sabe que pedir, por la cantidad de cosas interesantes que ofrecen. Es impresionante su variedad y exquisitez. La tarta de chocolate, la de fresas con queso, la de quiwi. Todas deliciosas. Si usted tiene problemas con el azúcar no vaya, porque sufrirá. El capuccino, me supo a capuccino. Tienen pancito para llevar muy bueno. No es un restaurante para comer, es una cafetería excelente para postres. El lugar tiene un ambiente común y la atención es regular tirando hacia abajo.