Fui por primera vez a este restaurante el cual me recomendaron muchísimos amigos por su brunch; en esta ocasión yo fui por un almuerzo con una amiga. Lo que más me encantó del lugar en primera instancia fue tu decoración tan coqueta y colorida mezclado con decoraciones vintages. Me pedí un bowl mexicano que originalmente puede pedir a base de arroz o quinoa pero como ya viene con frijoles como uno de sus carbohidratos me brindaron la opción de que podía ponerlo con vegetales; lo cual me pareció genial para aquellos que deseamos mantenernos en nuestras porciones. La comida en presentación y sabor estuvo fenomenal; la atención por parte del staff también fueron súper amables. Decidí tomar también un matcha con leche y a mi realmente me gustó mucho; ya saben el matcha realmente es un gusto adquirido😌
