A-banda

Deliciosa la Paella de Marisco y el Fideua....... amo su Fabada y las croquetas. La atención maravillosa y hablar de su Deliciosa Sangría Blanca y el Gin Tonic de sabores distintos..... no me cansare de ir.

Lugarcito situado en área segura, en un chalet renovado, sin ínfulas de restaurante pomposo. Su estacionamiento es casi nulo, básicamente de 4 autos y la calle aledaña. Tiene Valet Parking. El ambiente común no ofrece mesas separadas sino un largo pasillo en que se mueven las mesas de acuerdo al número de comensales. Juan, un sevillano recién desempacado de la madre patria, agradable y cortés nos atendió espléndidamente. El pulpo a la gallega lo esperé con más pimentón español pero no me decepcionó su sabor. A pesar de ser un restaurante español, me atreví a ordenar un filete de res en salsa de pimienta negra. Lo pedí tostado por fuera y rojo por dentro, así mismo me llegó. Perfecto. Jugosito. Los vegetales que lo acompañaron lo hicieron muy bien. El arroz negro con muchas arañitas estuvo excelente. El vinito Prima, elaborado con una combinación rara para mis conocimientos enológicos, elaborado con una variedad rara de uva "Tinta de Toro"(90%) y que nunca había probado y Garnacha (10%), procedente de Valladolid, estuvo interesante. No estoy seguro de que se justifican los 29.00 balboas que pagamos por el. Creo que gocé el momento y que en general es un rinconcito que vale la pena visitar.

A-banda es un restaurante mediterráneo, con especialidad en paellas y arroces a la marinera. Utilizan ingredientes frescos para ofrecer gustosos sabores. En mi opinión, las raciones son bastante pequeñas y la relación precio/cantidad no es buena. El servicio es excelente

me encanta esta casita, súper acogedora. la atención es muy especial, la comida deliciosa. Pocos estacionamientos, pero hay opción de estacionar en el car wash que queda diagonal Recomendado!

La comida estuvo deliciosa, las tapas de muy buena presentación y porción, el ambiente relajado y elegante, el servicio estuvo muy atento, los meseros conocían bien el menú y hacían recomendaciones atinadas. Hubo una confusión con la paella que pedimos, pero fueron muy amables al darse cuenta, nos hicieron el cambio y nos regalaron una tapa para picar mientras esprábamos. Excelente experiencia, estaré regresando para probar el arroz al horno.