La comida estuvo muy buena. Pedímos la tortilla de marisos el bibimbab y una sopa de fideos. Todo estaba muy rico, saludable y la atención fue muy buena. Se nota que es un negocio familiar y me gustó el ambiente medio clandestino que tiene el lugar.

La comida estuvo deliciosa, pedimos un menú degustación que traía 6 platos de los cuales el único que no me sorprendió para nada fue el postre, pero el resto de los platos fueron preparados de manera impecable, con un buen balance de sabores y en las porciones eran correctas. El servicios fue excelente, lo cual es muy raro en Panamá. El ambiente es bueno porque el edificio es antiguo y está bien conservado, tienen una terraza afuera que es muy agradable, pero la decoración no es completamente de mi gusto. Lo recomiendo y, aunque es un poco caro, seguro volveré.

Yo pedí un shawarma mixto y la verdad es que me pareció caro para lo que es: un shawarma, que no estaba bueno, y una bebida y en total pagué 11 dólares. Fue a la sucursal que tiene en Vía Argentina y el local estaba sucio por dentro y la carne del shawarma está totalmente expuesta a la calle, a las moscas y el polvo....esto me pareció poco higiénico. La verdad es que no quiero repetir, ni se lo recomendaría a nadie.