Fuimos a desayunar, todo lo que pedimos estuvo muy bueno, especialmente el desayuno panameño y las tostadas francesas. nos gustó mucho el ambiente, el restaurante es súper grande, hay muchísima luz natural y es muy tranquilo. también tienen estacionamientos bajo techo.

Fuimos un grupo de 7 persona, originalmente había reservado para 6 comensales, pero llame 30 min antes de llegar y me dijeron con gusto me reorganizaban. Comimos varios de los not so small treats y nuestro favorito fueron los tacos don julio, luego comimos los big treat el cochinillo y lobster mac and cheese fueron muy bien recibidos. Pedimos también entraña que llego muy cocida, pedimos que nos la cambiaran y así lo hicieron. los potres todos muy ricos en especial el de banano y el de oreo, nutella y pop corn. Con respecto al ambiente, la musica esta un poco alta y no nos permitia conversar.

El ambiente de Tomillo es espectacular, tanto panameños como extranjeros quedamos fascinados. El concepto de compartir nos encanto, nos permitio probar gran parte del menu, de lo que probamos el ceviche de atun y las cachapas A+.

El personal fue muy amable desde que llegamo (incluyendo al seguridad del estacionamiento), pedimos sentarnos en la parte de arriba para que mi hija pudiera disfrutar del area de niños, creo que esto ocasiono una pequeña demora para que nos trajeran el menu y los caldos de cortesia que ofrecen, de alli en adelante todo estuvo bien. Pedimos un picada de chorizo para comenzar la cual es consistentemente buena y mi esposo pidio el especial que trae entraña y camarones, estaban deliciosos y yo pedi entraña la cual estaba tambien muy buena.

Fuimos domingo, el ambiente es familiar, la comida muy rica y el servicio bastante rapido para lo lleno que estaba.