No se justifica su precio. Al igual que Vitali, se ajusta a las preferencias de una comunidad específica, pero está sobrevalorado y es caro. Por el mismo costo, se puede comer el doble en otro lugar de igual o mejor categoría.
Lamentablemente, íbamos con entusiasmo y fue decepcionante. Llegamos con la intención de pedir el almuerzo, pero la mesera nos informó que no podíamos hacerlo porque el almuerzo comenzaba oficialmente a las 12:00 y eran las 11:56. Literalmente tuvimos que esperar que ella atendiera otra mesa y pasaran 4 minutos, lo cual me pareció ridículo, sobre todo considerando que luego el tiempo de espera para recibir la comida fue de casi una hora. Durante ese tiempo, la mesera apenas estuvo pendiente de la mesa.
La situación llegó al punto de tener que llamar al supervisor, quien intervino y con la mejor buena voluntad intentó remediar la situación. Como compensación, nos ofrecieron dos cervezas de cortesía, lo cual agradecimos el detalle… hasta que vimos que las habían incluido en la cuenta al momento de pagar.
En cuanto a la comida, fue otra gran decepción. La cazuela de mariscos era más bien una pobre interpretación, con escaso marisco, salsa aguada, y un de copo de una especie de crema. El pescado, por su parte, flaco con poca carne. En resumen, nada que justifique el precio que pagamos.
En corto, este lugar quizás sirva para tomarse un par de pintas, porque es un lugar agradable, pero definitivamente no es un lugar para comer. La relación calidad-precio de los platos no es buena, y la atención (incluyendo el tiempo de la cocina) deja mucho que desear.
¡Espectacular! 200% recomendado. La comida es fresca, casera, ¡deliciosa!. La atención es insuperable, te atienden con una amabilidad y dedicación como nunca antes vi en Panamá. Una minuciosa atención al detalle y al cliente.
Los domingos están desbordados y fallan con la atención. No están pendientes de las mesas, se le enredan los pedidos, no saben manejar el movimiento de pedidos con los auriculares, se confunden los pedidos con las tablets, llegan los pedidos a destiempo porque falta coordinación entre cocina y salón (mesas que llegan mucho después reciben los pedidos antes) La comida es 3.5, pero sería un lugar a regresar si mejoran la atención.
Era uno de los pocos lugares en Panamá que valía la pena visitar, por la calidad de la comida, el precio y el ambiente. Lamentablemente, han hecho cambios en el menú, acortándolo a 4 opciones de desayuno, y en los precios, ¡duplicándolos!, y desmejorando visiblemente los platos, en cuanto a la cantidad y su presentación. ¡¡Toda la magia de este lugar se fue!! Con mucho pesar, no volveré ni lo recomendaré.
Me sentí atraída a este lugar por su cuenta de Instagram y porque prometía ser un lugar con una experiencia distinta en Panamá. Terminamos comiendo en una terraza (sin decoración, nada especial), con calor, en mesas de madera cualquiera. La comida mala y cara, sin sabor, olvidable. Fuimos con ilusión, salimos decepcionados. No lo recomendaría.
Excelente lugar para desayunar los domingos. La comida deliciosa y ¡los precios espectaculares! Parece un pedacito de boquete en la ciudad. La atención es muy dedicada. Aún no descubierto por muchos, no se abarrota de gente y siempre se puede ir tranquilo a comer. ¡Espero que no cambien y no pierdan su esencia en el tiempo!
Es un buen lugar de paso para tomar algo con un pan o un dulce o para llevar. No recomendable para desayunar. El café tiene amplia oportunidad de mejora.
Adeles
No se justifica su precio. Al igual que Vitali, se ajusta a las preferencias de una comunidad específica, pero está sobrevalorado y es caro. Por el mismo costo, se puede comer el doble en otro lugar de igual o mejor categoría.
Canal House
Lamentablemente, íbamos con entusiasmo y fue decepcionante. Llegamos con la intención de pedir el almuerzo, pero la mesera nos informó que no podíamos hacerlo porque el almuerzo comenzaba oficialmente a las 12:00 y eran las 11:56. Literalmente tuvimos que esperar que ella atendiera otra mesa y pasaran 4 minutos, lo cual me pareció ridículo, sobre todo considerando que luego el tiempo de espera para recibir la comida fue de casi una hora. Durante ese tiempo, la mesera apenas estuvo pendiente de la mesa. La situación llegó al punto de tener que llamar al supervisor, quien intervino y con la mejor buena voluntad intentó remediar la situación. Como compensación, nos ofrecieron dos cervezas de cortesía, lo cual agradecimos el detalle… hasta que vimos que las habían incluido en la cuenta al momento de pagar. En cuanto a la comida, fue otra gran decepción. La cazuela de mariscos era más bien una pobre interpretación, con escaso marisco, salsa aguada, y un de copo de una especie de crema. El pescado, por su parte, flaco con poca carne. En resumen, nada que justifique el precio que pagamos. En corto, este lugar quizás sirva para tomarse un par de pintas, porque es un lugar agradable, pero definitivamente no es un lugar para comer. La relación calidad-precio de los platos no es buena, y la atención (incluyendo el tiempo de la cocina) deja mucho que desear.
Da Vittorio Trattoria Romana
¡Espectacular! 200% recomendado. La comida es fresca, casera, ¡deliciosa!. La atención es insuperable, te atienden con una amabilidad y dedicación como nunca antes vi en Panamá. Una minuciosa atención al detalle y al cliente.
Salva
Demasiado caro para la calidad y cantidad de comida. Las galletas saben a galleta de caja. No hay manera de que regrese o recomiende.
Tosto Coffee Co (San Francisco)
Los domingos están desbordados y fallan con la atención. No están pendientes de las mesas, se le enredan los pedidos, no saben manejar el movimiento de pedidos con los auriculares, se confunden los pedidos con las tablets, llegan los pedidos a destiempo porque falta coordinación entre cocina y salón (mesas que llegan mucho después reciben los pedidos antes) La comida es 3.5, pero sería un lugar a regresar si mejoran la atención.
Baloo Café
El café es una amarga decepción, la propuesta de bebida y comida deja mucho que desear, una experiencia que definitivamente no repetiré.
Juan Manuel
Era uno de los pocos lugares en Panamá que valía la pena visitar, por la calidad de la comida, el precio y el ambiente. Lamentablemente, han hecho cambios en el menú, acortándolo a 4 opciones de desayuno, y en los precios, ¡duplicándolos!, y desmejorando visiblemente los platos, en cuanto a la cantidad y su presentación. ¡¡Toda la magia de este lugar se fue!! Con mucho pesar, no volveré ni lo recomendaré.
Porky Lobster (Causeway)
Me sentí atraída a este lugar por su cuenta de Instagram y porque prometía ser un lugar con una experiencia distinta en Panamá. Terminamos comiendo en una terraza (sin decoración, nada especial), con calor, en mesas de madera cualquiera. La comida mala y cara, sin sabor, olvidable. Fuimos con ilusión, salimos decepcionados. No lo recomendaría.
Juan Manuel
Excelente lugar para desayunar los domingos. La comida deliciosa y ¡los precios espectaculares! Parece un pedacito de boquete en la ciudad. La atención es muy dedicada. Aún no descubierto por muchos, no se abarrota de gente y siempre se puede ir tranquilo a comer. ¡Espero que no cambien y no pierdan su esencia en el tiempo!
Ibakery 888
Es un buen lugar de paso para tomar algo con un pan o un dulce o para llevar. No recomendable para desayunar. El café tiene amplia oportunidad de mejora.