El Santuario es toda una experiencia... Llevé a una amiga de México y quedó encantada con el lugar y la comida, aunque es un poco costoso en mi opinión. Sin embargo, el lugar de verdad vale la pena, super ambiente y la decoración es de bien gusto, el hotel es simplemente hermoso y te cuenta una historia en cada rincón.

Fui a La Strega de Calle 50, mi favorito, ayer con una de mis mejores amigas. Me llevé la grata sorpresa que había un festival de tragos Bacardí y aunque no tomo ron blanco, este trago estaba delicioso. La chica que nos atendió, super amable, me ofreció la promoción y me pareció interesante probar algo diferente más allá del Aperol qué siempre pido y la verdad estaba muy rico. Buena esa!

El domingo por la tarde me llamó una buena amiga y me dijo literalmente... necesito tomarme un buen Aperol Spritz, yo sin dudarlo le dije vamos a La Strega de Bella Vista o Calle 50. Debo confesar que el primer trago que pedimos no estaba del todo bueno; sin embargo le dijimos a la chica que nos estaba atiendo y ella le llevó nuestra sugerencia al bartender. Los segundos mejoraron y los terceros también... un buen detalle fue que el bartender llegó a nuestra mesa a preguntarnos cómo estaban los tragos y cómo podían mejorar. Me pareció súper bueno, que te escuchen y que en vez de enojarse tomen tu feedback y lo apliquen. Punto para ellos! La comida 10/10... cabe señalar que solamente comimos entradas, solamente queríamos picar y tomarnos nuestros Aperols para cerrar el fin de semana.

Tuve el mal tino de ir por segunda vez a Terrat y mi experiencia fue peor que la primera, al menos quedé claro en no volver. Si bien es cierro, el ambiente es bastante bueno y ese día que fui había música en vivo, la atención fue pésima, pedí al menos 4 veces un trago eso demuestra el desorden de los saloneros y que ciertamente no están preparados para atender a tantas personas. Como siempre pedí un Aperol Spritz de entrada y de momento le puedo otorgar un título indiscutible: el peor que he probado en mi vida! Y eso es mucho decir. Así que me cambié a tomar gin tonic el cual estaba más o menos, nada fuera de lo extraordinario.

Llegué por segunda ocasión, la primera fue un almuerzo de trabajo y la verdad es que la comida, los tragos y el servicio estuvieron bastante bien, pero hoy fui a cenar y la verdad es que me llevé una decepción muy grande con los tragos y con el servicio. Si bien es cierto que llegamos un poco tarde (10.00 pm) el servicio fue bastante deplorable pero nada como los tragos... pedimos un Lychee Martini y la respuesta fue "tenemos el licor pero no la fruta... " ante eso pedimos una Margarita de Mango pero sorpresa! Sólo habían de maracuyá, fresa o clásicas... entonces para qué están en el menú? Yo me pedí mi acostumbrado Aperol Spritz... y adivinen? Estaba malísimo! Al punto que me tuve que pedir una cerveza. Le dije al salonero ño malo que estaba el trago y su respuesta fue... ¿qué le faltaba? Yo le respondí... Todo! Y además le sobraba la cereza que le pusieron, porque el Aperol no lo lleva. Por supuesto que no hubo respuesta... Tengo que ser justo, porque la comida estuvo bien muy buena presentación y muy buen sabor. Lamentablemente no puedo decir que fue una buena experiencia, así que no creo que vuelva.

Sábado por la tarde y con ganas de comer rico y tomarse alto refrescante... ¿Alguna idea o alguna recomendación? Ninguna mejor que Le Boucherie, comida deliciosa y tragos bien hechos. Como siempre pedí un Aperol Spritz, pero no me encantó. Se lo dije al salonero y éste con la mejor actitud fue hablar con el bartender y me trajeron otro a mi gusto. Esto no tiene precio! Me ganaron por siempre. Full recomendado!

Sábado por la tarde, antojado de una buena pasta... ¿qué hago, qué hago? Se me vino a la memoria ese restaurante acogedor y bonito de Calle 50, referente de buena cocina italiana. Llamé a mi mejor amiga para ver si quería acompañarme y zaz! Nos vamos... Pedí un Aperol Spritz con un poco de duda porque los últimos que he probado me han decepcionado y Oh, Sorpresa! El mejor Aperol que he probado en Panamá... deliciososo! Pedimos dos pastas para compartir junto con un carpaccio de pulpo y wow! Todo rico, en su punto, salsas deliciosas, pan caliente... La atención inmejorable, atentos, amables... la verdad la pasé super bien, comí rico y sobre todo aquel antojo que tenía por comer pasta lo sacié y hasta quedé feliz... Recomendado!

Uno de mis lugares favoritos en Costa del Este para hacer brunch un domingo... El ambiente de Town Center es inmejorable, además este lugar es pet friendly, que para las personas que tienen mascotas es realmente importante. Buena comida y buena atención; sin embargo, los domingos tienen un Open Mimosas, las cuales no están del todo bien. En dos ocasiones me ha pasado que los saloneros se estresan porque tienen que cerrar caja, cambiar de turno, etc etc... Temas domésticos que al comensal no le interesa saber pero que igual te lo dicen. Es una lastima que un lugar con gran potencial se maneje de esta manera, ojalá que estás áreas de oportunidad las tomen en cuenta y las subsanen. Por lo demás, es un gran lugar para disfrutar de una velada agradable con amigos.

Una buena amiga me llamó el sábado pasado y me dijo "estoy down" necesito salir... Yo le dije, no te preocupes vamos al Casco y allá con un par de tragos las penas se olvidan. Nos fuimos a Blue Moon de Casco y mejor elección no pudimos hacer... En definitiva este lugar es una joya escondida en el área: lugar bonito, buen ambiente, servicio de primera y buena comida. El sábado a partir de las 09.00 pm había un grupo de música en vivo, de esos que se atreven a complacer al público y que la gente les pida canciones: cantaron desde Carlos Vives hasta Fonseca, Enanitos Verdes y Hombres G. Todos bailamos, cantamos y disfrutamos muchísimo. Lo que serían unos tragos de despecho, terminaron siendo una fiesta completa! Hacia tiempo no me divertía tanto. Espero volver pronto, pronto!

Salí con unos amigos a cenar y finalmente cerrar la noche con unos tragos, tenía ganas de conocer este lugar así que solo fuimos a la segunda parte del plan que era tomar algo para cerrar. Wow! El ambiente estaba a tope, la gente animada bailando y la música inmejorable. Me sentí tan a gusto de ver gente entre los 20-30s conviviendo con gente de +40. El factor sorpresa lo manejan súper bien, durante el rato que estuvimos llegó un mariachi, luego un sanquero y finalmente hubo un show con fuego. Muy animado todo! Los bartenders y saloneros super amables y atentos y los precios están muy bien, no son exageradamente caros como en el Casco ni baratos, diría que están acordé. Full recomendado!