Hice cita para San Valentín y no esperaba mucho porque usualmente esos días se llenan mucho los restaurantes y el personal no se da abasto. Acá fue distinto y estaban preparados para la ocasión. La comida estuvo excelente, pedimos entradas, plato fuerte, sangría y postre. El personal se esmeró en que la pasáramos bien y el chef supervisó personalmente cada mesa. La ubicación no es muy buena, por lo que sugiero usar Uber o valet parking ($4). La comida se trata de platos típicos panameños al estilo fusión y todo estuvo muy bueno.

PROS: El guacamole sabía fresco El dorado ahumado sabe bien Los tacos tenían buen tamaño El pollo tenía buen sabor (sabía a brisket ahumado) La música estaba buena CONS: La presa del jerk chicken podría ser más grande (1 solo encuentro a $6.50) Para quedar tan lejos, la experiencia se empaña un poco por la falta de estacionamientos y pocos meseros) Escogimos sentarnos afuera porque adentro olía demasiado a pescado frito pero afuera los meseros se olvidaron de nosotros: pedimos una Coca Cola adicional que no nos trajeron y como no vimos más a los meseros, tuvimos que entrar a pagar. :(

La comida está muy buena. Pedí La Gringuita con papas fritas y todo estaba excelente. El servicio es rápido y son muy amables.

Buen ambiente y buen servicio. Lo mejor para tomarse un café con churros y platicar un rato en la terraza.