El servicio insuperable, realmente destacado. Fuimos a por tragos y picadas, pedimos solo entradas para compartir, pulpo con curry y coco que estaba un poco duro pero se dejaba comer, ceviche delicioso, y croquetas de jamón serrano buenas sin aspavientos. A la margarita frozen de fresas y maracuyá le zumbaba el mango, bueno no, le zumbaba las mezcla de sabores equilibrada y deliciosa.

Noche de cumpleaños, tapas y sangría, no pudo ser mejor. Pulpo a la gallega que se deshace de lo suave, gambas con un toque picante, hongos al ajillo mero en salsa verde mmmmmm

Menú variado, algo thai, algo vietnamita, algo japonés, algo chino con esa fidelidad a los orígenes de los platos que puede tener una franquicia que busca el toque correcto. Cumpleaños feliz. Pedimos Gyozas de vegetales de entrada que tenían un sabor y textura delicadas, altamente recomendables, luego phad thai de mariscos que por sugerencia del mesero compartimos ya que la ración es grande, me hubiera gustado un poco más picante pero la disfrutamos, y un rollo Fuji Deli que le encantó a la cumpleañera. Cervezas con la temperatura perfecta. Y de postre, pero sin cantadera, un brownie con caramelo y helado de vainilla compartido entre 3, y que explotaba de almíbar.

Antes era 24/7 ahora 24/fines de semana. Lo bueno de esto es q puedes desayunar a cualquier hora los ricos omelette, los pancakes o las mmmmmm deliciuos tostadas francesas. Jugo de naranja, capuchino y listo. Disfruten

Puedes empezar por los postres, hechos de la mano de Manuela la dueña, siempre frescos y riquísimos. Claro, también están las pizzas, masa crujiente, mi preferida la amalfi que es con queso feta.

Desayuno de domingo, huevos rancheros buenos sin aspavientos y huevos con salmón lo mismo, eso si el café excelente. Si no viven en Costa del Este y están paseando vale la pena x el café.

Lo más rico sin duda las entradas: empanadas de pulpo y los taquitos de chicharon, órdenes chicas y cariñosas. Pesca del día sobre una cama de arroz especiado, que estuvo bien (el arroz) pero el pescado nada del otro mundo.

Frente a la plaza de la Catedral en Casco Viejo, comida italiana ingredientes frescos. Si eres casi ovolacta vegetariana como yo los ravioles de factura casera con ricota y espinacas y salsa pomodoro te van a gustar.

Pupusas!! mixtas de frijol chicharron queso y por supuesto encurtido, con un toque de remolacha. Cubetazo de cervezas con la temperatura precisa. La decoración es rústica y agradable. Por ahora solo aceptan efectivo, bien vale la pena para los amantes del maíz y los frijoles en sus diferentes variantes.

Para aclarar no estamos calificando un restaurante fusión, ni gourmet, sí un restaurante que por años mantiene calidad y sabor. Para los monotemáticos como yo, que para cambiar de plato tiene que variar el restaurante por que casi siempre pide lo mismo, esta certeza es mi zona de confort. Entonces al grano y que sea de maíz,como el delicioso emparedado de queso blanco fresco en tortilla, con lechuga y tomate y sin ketchup que invariablemente pido si vengo a cenar. Tortilla crujiente, queso semiderretido sabores que se complementan sin competir. A eso vine!