El brisket, la entraña y el pulpo son una experiencia religiosa en la boca y el cheesecake de maracuya para terminar junto a un cafecito espresso cierran cualquier comida de manera perfecta.

Mi hermano me invitó a un almuerzo tarde (de esos tipo 3pm) a este restaurante ¨feo¨ pero con muy buena comida mexicana según sus palabras. Tengo que decir que efectivamente, el lugar no es el mas bonito, las sillas no son las más cómodas, incluso la apariencia del personal no es la mejor, sin embargo salí muy sorprendida de ahí aquella tarde. Pedimos de entrada el guacamole, unos frijoles refritos y totopos con queso. Todo fresco, el mejor guacamole que he probado y lo mejor el precio! Pedí una limonada que sorprendentemente era natural, ya que siempre te dicen que lo es y terminas tomando clight, pero esta tenia la combinación perfecta entre ácido y dulce. Con la comida vi la gloria. Yo pedí tacos suaves de pollo y mi hermano al pastor. tengo que decir que estos segundos no son mis favoritos, pero me sorprendieron. las tortillas no son de paquete, son frescas echas en casa con harina de maíz y las porciones están muy bien. Para rematar como quien dice, probamos el postre. Empezamos con un flan de casa que estaba tan bueno que tuvimos que pedir 2. Al final mi hermano pago 30 dolares con propina incluida y todo, nos fuimos con la barriguita llena el corazón contento y ganas de regresar, cosa que hicimos este fin de semana, solo que ahora fuimos con mi mamá. En esta ocasión pedimos las mismas entradas pero para comer pedimos unas carnitas para 3. Yo no soy muy amante de el puerco, pero este, estaba divino. Conclusión: si estas buscando un lugar de comida mexicana bueno y barato este es el lugar. no digo bonito porque no es bonito, así que si estas buscando lujo vete a otra parte. Excelente comida, este es el lugar. Buenos precios, buena comida, definitivamente entre mis top 10. Super recomendado el guacamole de la casa y el flan!

Una de las mejores experiencias gastronómicas de mi vida! Excelente comida, excelente servicio y la casa de Bella Vista que remodelaron para hacer este restaurante es una belleza. Recomendadísimo para una cena romántica, pedida de mano o celebración. El precio esta increíble para todas las bondades que presenta este lugar.

Hoy fui por segunda ves a este lugar. La primera con mi jefe y visitantes de Holanda y todo estuvo OK. El día de hoy fuimos mis jefes y compañeros de oficina. Lo primero que nos molestó muchísimo es que a pesar de haber llamado a las 11am a reservar una mesa de 8 para las 12:30, la misma no se encontraba armada a nuestra llegada. El restaurante no estaba lleno, así que el problema fue resulto, pero nos preguntamos que hubiera pasado si no hubiera habido mesas disponibles. paso seguido nos dispusimos a pedir nuestras bebidas. Muy amablemente nos ofrecieron una entrada de chicharrones de salmón que estaban bastante buenos, pero que demoraron mas de media hora en llegar. Algunos compañeros pidieron sopas de entrada que tomaron igual tiempo en llegar. Luego de 50 minutos de estar en la mesa por fin llegaron los platos fuertes, pero llegaron de 3 en 3. Primero salieron los pastas una con brocoli y tocino y otra Diabla; 5 mins después llegaron la lasagna y los canelones de espinaca y ricotta, que fue lo que yo comí y 5 minutos después, los 2 filetes al fungí y el filete a la parmesana de mi jefe. Si, el plato de mi jefe fue el último. Las pastas estaban mas o menos en las palabras de mis compañeros, la lasagna y mis canelones daban tristeza en cuanto a proporción, presentación y sabor. Se veía que habían sido recalentadas. los filetes estaban sobre cocidos y llegaron fríos a la mesa, al igual que la lasagna y mis canelones. Estábamos tan decepcionados todos de nuestras comidas que no quisimos pedir postre para evitarnos otro mal rato con algo que debería ser tan rico. Al final conversando de regreso a la oficina llegamos a un consenso. El lugar es muy caro para lo que ofrece y todos concluimos que pudimos haber comido muchísimo mejor en cualquier otro restaurante por igual precio o incluso mejor.

Fui al restaurante a cenar con unos amigos. Me habían hablado muy bien de este, así que estaba muy entusiasmada por ir. Nos sentaron dentro ya que afuera estaba muy lleno. Algo que me sorprendió es que no nos pusieran agua en la mesa. Luego de esperar 20 minutos y de insistir varias veces a varios meseros nos tomaron la orden. Los dirty mojitos están muy buenos, el tartar de atún espectacular y los ceviches ni se diga. el famoso hot dog de plátano la verdad no me gusto para nada. el plátano estaba duro y el pedacito de entraña es mínimo en comparación al tamaño grotesco del plátano. Tampoco me gusto la presentación del mismo. Como éramos 4 y ya habíamos pedido las entradas solo pedidos 3 platos fuertes y dos acompañamientos. El pulpo estaba muy bueno y excelentemente cocido, sin embargo el tamaño versus el precio dejó mucho que decir. La porción para una persona me parece que es muy pequeña. Las brochetas de pollo estaban bien sazonadas, pero el filete criollo estaba simple y duro. En general la pasamos bien y después de tres mojitos cada uno habíamos olvidado la demora inicial. Me gustaría volver y probar otros platillos, pero la verdad es que si esta bastante caro en comparación con las porciones que sirven.

Los quesitos son lo mejor! Yo he manejado de San Francisco a Clayton solo por ellos. El dueño siempre esta en el lugar y es muy atento y educado.

Recientemente fui a este restaurante con una amigo. Pedimos una entrada para los dos, un carpaccio de res que estaba bastante bueno (mas no el mejor que he probado). El pidió el rissoto de pato ahumado que a mi parece no estaba tan waoooo y yo pedí una pasta negra que debo decir estaba increíble. Muy bien acompañado de un vino blanco y un buen postre, mouse de chocolate con brownie al final. El ambiente esta excelente, la terraza es fresca y agradable, pero lastimosamente el servicio, a pesar de lo atentos que fueron me dejo con un signo de interrogación en la cabeza. MUY MUY demorados los platos, entre la entrada y el plato fuerte esperamos 30 minutos o mas, pero pudo ser solo mala suerte de ese dia.

Fui porque me encanta la comida mexicana, pero fue una decepción para mi y mi acompañante. La comida esta OK, pero muy cara para lo que es. Probablemente por ser franquicia o porque realmente no son comida mexicana al 100% pero no me gustó mucho la sazón. La presentación de la comida por otro lado se lleva todos mis likes, al igual que la Margarita, pero las he probado mejores.

La comida esta OK, pedimos una pizza vegetaría que misteriosamente tenia anchoas (cosa que no gusto mucho) y las cebollas estaban demasiado crudas como para disfrutarlas. Sin embargo, la tenia un grueso perfecto y un riquísimos sabor a horno de leña. La pasta carbonara esta mas o menos, el bacon que utilizan tienen un sabor muy fuerte y esta cortado en taquitos muy grandes.