Para comer japonés no pienso en otra opción que Hikaru. Las ensaladas son deliciosas. Las giozas no tienen pierde. En fin nunca me ha decepcionado.

Siempre me ha gustado este lugar. El sancocho está delicioso y las alitas superiores. Ahora al fondo hay un espacio con juguetes. Si tienes niños pequeños, es una buena alternativa para comer rico y que los niños y niñas se diviertan.

De lejos la mejor hamburguesa. Cuando voy no dejo de pedir las papas dulces, son las mejores que he probado en Panamá. Sin duda calidad

Es mi lugar favorito si de carnes se trata porque además tienen una zona de niños estupenda. Hay una cama de pelotas con el típico laberinto que le gusta a los niños. Así ellos juegan mientras llega la comida. Cuando voy pido siempre guacamoles con tortillas, nunca dejo de pedirlo. La entraña también es mi favorita.

Tuve la mala suerte de pedir una spanakopita y parecía hecha hacia tres días. No la pude comer. Muy amablemente ellos me devolvieron el dinero pero ya desde ahí nunca pido para comer. Suelo ir porque me queda bien por el trabajo pero solo recomiendo café y emparedados.

Cuando quiero comer español, este es mi lugar. El pulpo a la gallega y las croquetas son siempre tradición pedirlas. De plató fuerte, siempre voy por cochinillo o cordero. De bebidas, la sangria está deliciosa.

El lugar me parece precioso y le trasladó a Grecia. Sin embargo, al momento de pedir la comida me asombró mucho que cuando pides los básicos de dips griegos, el pan lo tengas que pagar aparte. Luego la delas comida aceptable pero si hay algo que rescatar del lugar es el ambiente.

Como peruana debo de decir que es de los más auténticos. Si hay algo por mejorar, diría que me encantaría que tuviesen rocoto o crema de rocoto. Después todo excelente y muy recomendado.

El sabor de la comida es muy aceptable. Definitivamente me quedo con el sabor y la atención del local de San Francisco.

Me gustó mucho el trabajo de los meseros para que estuviéramos cómodos ante una llovizna. La comida me pareció buena.