Es el mejor lugar para comer comida típica panameña si no quieres arriesgarte en qué algo salga mal. Tienen un amplio menú con diferentes opciones para cada paladar. Recomiendo el tamal de olla y la ropa vieja.

Muy buen café y los postres increíbles. Las porciones son grandes al igual que el café. Pedí un Capuchino mediano y era un vaso enorme.

El sitio es bonito, y la atención del personal fue buena. Lamentablemente el día que fuimos tenían problemas con el agua por lo que no ofrecían café, por lo que mi experiencia no fue de 5 estrellas. Los precios son algo elevados para mí gusto. No estoy seguro si volvería.

Comida callejera venezolana. Perros calientes, Pepitos y hamburguesas. La atención es buena aunque no esperes que u lugar muy fancy, es un foodtruck rodeado de carros pues en el centro es un estacionamiento. La comida es muy buena.

Fuimos a este sitio por la recomendación de un amigo y teníamos bastantes expectativas por probar que tal. En mi opinión la comida está sobrevalorada, es decir la comida está rica, pero no considero que los precios sean adecuados. Pedimos el Austin Mamas Platter que cuesta $19 y viene con 4 tiras de Briskett, una orden pequeña de papas, y un panecillo.