Es difícil conseguir estacionamiento, por lo que tienes que utilizar Vallet Parking. Cusndo llegas posee un área tipo terraza, abierta, que lastimosamente está contaminada de humo por las personas que fuman (algo que es prohibido por ley), así que si vas en familia, forzosamente debes entrar al área cerrada con A/A. Tiene áreas reservadas para grupos. El servicio es adecuado, estaban pendientes de las necesidades, aunque demoraban por el volumen de comensales. Poseen entradas y platos fuertes con variedad de carnes, cortes nacionales e importados, los mismos van acompañados de la salad bar. Los cortes no son exquisitos, pero son buenos.

Primera vez que venimos en familia y el ambiente es accesible, buenos estacionamientos, tienen terraza o dentro con A/A. El servicio fue muy bueno, estuvieron pendiente de las necesidades y brindaban sugerencias sobre los platos. Poseen la comida muy variada, desde mar, tierra, pastas, carnes de res y pollo, hamburguesas, sodas, jugos naturales, batidos, postres como flan, cheesecake, en fin, hay para escoger y los sabores son muy buenos. Recomendado….

Vine para celebrar un cumpleaños, me lo sugirió la APP por cercanía, reservamos y me confirmaron. Está en calle Thomas Owens (64), es una casa que dice Hierro y Fuego, por ningún lado tiene el nombre del restaurante. Entramos, pregunté y aparentemente estaba en el sótano. Llegamos y teníamos el restaurante para nosotros, solamente. Habíamos visto el menú antes para no demorar. Se pidió la Big Panamá y el Angus Burger y nos dicen tajantemente, aquí no tenemos hamburguesas (estaba en el menú). Sinceramente, aunque la comida esté muy buena, no regresaré nunca más, somos muy pacientes y estuve a punto de retirarme del restaurante, el servicio deja mucho que desear, pedíamos un plato y nos decía que eso no se puede pedir “ese acompañamiento”, hay maneras de decir las cosas. Es una lastima, el trato y el servicio es parte de la experiencia de acudir a un restaurante, para ello hubiese pedido a domicilio en otro lugar. ¡Que decepción!

La comida es Gourmet. Son pequeñas porciones (en los emparedados), aunque las porciones de los bowls son adecuadas. Las bebidas naturales no son económicas y las bebidas procesadas son más económicas. Es un lugar interesante para conocer y probar, aunque si vas con hambre, no es el lugar indicado, pero si quieres probar sabores, es una buena opción.

Es primera vez que como una arepa venezolana, recomendado por una experta en arepas de esa área y sinceramente, están exquisitas. La masa es crujiente, consistente y el relleno están exquisitas desde las tradicionales con pernil y queso hasta las básicas con jamón. Y si le agregas salsa de ajo, le da un toque de sabor muy Gourmet. Definitivamente volveré, lo único en contra fue que demoraron en la atención y el ambiente es agradable.

El ambiente es agradable, la carne es jugosa, los acompañamientos van desde papas fritas hasta ensaladas, hay hamburguesas, wraps, ensalada César, pastas, salmón, mucha variedad. Vinimos en familia para celebrar el día de las madres, demoraron como media hora en traer los pedidos.

Acudimos sin reservación, pero aún así nos atendieron, para celebrar el día de las madres. Poseen abajo un área cerrada y arriba una terraza. Brindan desayunos americano, panameño, entre otros y también almuerzos como raviolis, fetuccini Alfredo, con pollo, hamburguesa, ensalada César, etc. La comida y el ambiente es muy agradable y es un buen lugar para pasar un buen rato.

Te validan el estacionamiento, el ambiente es cómodo, tienen sodas refill, las carnes son angus, tienen diferentes opciones de hamburguesas, desde las clásicas hasta las keto (sin pan). Puedes convertirlo en combo por 3.99 (sodas + papas fritas). Las hamburguesas son de muy buen sabor, igual que las papas. Es una opción para compartir.

Está justo al lado del nuevo Hospital del Niño y el único inconveniente es el estacionamiento, no tiene, es como una casa y frente a ella tiene una acera para 2 carros, que depende del primero que llegue si serían para 2 o solamente 1. Sinceramente, el ambiente del restaurante es bastante acogedor, tiene muchas mesas, el servicio es muy bueno, la joven que nos atendió es muy atenta. El dueño está presente y pendiente. la comida es excelente, las hamburguesas clásicas y hawaiana de carne son casi Gourmet. Las costillas de cerdo de 200g son muy suaves. Las papas fritas y aros de cebolla son exquisitas.

Venimos cada cierto tiempo ya que la comida es muy buena y es una opción gastronómica para variar. Siempre pido bún (fideos de arroz) junto con las albóndigas con salsa agridulce y de entrada unos nem frescos de camarones con vegetales y una ensalada de piña con pepino (junto con arroz blanco)