Las entradas muy buenas el tartar de tuna con aguacate muy bueno. Los emparedados como siempre buenos con ese pan que es diferente, ahora tienen unas cervezas artesanales que están buenas la chivo perro la recomiendo. Ideal para ir de compras y luego un emparedadito.

Nueva propuesta con la terraza de cervezas y tapas. Pedí de entrada unas croquetas surtidas. Fui un viernes y tenían una Bbq con todo tipo de carnes importadas, pedí un rib-eye yo y mi mujer un trio de chorizos y unos langostinos. Todo al punto con música en vivo muy buena. Le falto para mi gusto un poco mas de luz por lo demás excelente.

Esta vez probé unos platos nuevos que dicen que van para la nueva carta. Unas empanadas de ropa vieja, un montadito de huevo de codorniz con trufa. Y siempre que voy pruebo el wantoons y nunca falla. De postre probé uno que es como un brownies pero de dátiles muy bueno.

Ya he ido otras veces y me deje recomendar los especiales. Ceviche de salmón súper. De postre una piña de crema catalana tropical súper.

Empezó siendo tienda gourmet, pero poco a poco la oferta de comida se va superando. El viernes fui a tomar un menú degustación con un chef venezolano y fue memorable la cena, muy buena con maridaje de vinos espectacular.

Las vistas son impresionantes si te colocas en la parte de arriba, con toda la bahía de panamá frente a ti. El servicio normal, pedí 2 entradas y 2 tragos, llegaron antes las entradas que los tragos. Lo interesante es que te ponen un aperitivo y en pocos lugares lo hacen en Panamá. Es el primer lugar que te lo ponen por el momento que he ido. La comida normal nada espectacular. Lo mejor las vistas.

La comida está buena pero no mata otro asiático en panama. lo que me extrañó es que estando buena, el chef estaba todo el rato en la barra con la laptod , en ningún momento superviso lo que pasaba adentro de la cocina. La pizza asiática está buena interesante en vez de la masa tradicional de pizza el crujiente de arroz.

Esta vez fuimos para el 31 diciembre, yo pedí el menú de nochevieja un Napoleón de salmón ahumado con langosta muy bueno, de segundo pedí el rack de cordero con arroz salvaje con pasitas. Mi esposa pidió de entrada un carpaccio de dorado muy rico y unos raviolis de tomate seco con mozzarella y crema de pesto muy bueno.

Fui con mi pareja, y por suerte fuimos temprano luego se llenó de fiestas navideñas y demasiado jaleo, las entradas espectaculares, y los platos principales buenos aunque sin tanto alboroto en el restaurante lo hubiera disfrutado más. Muy aconsejable.

Volví por segunda vez, y en los especiales probé la crema de frijoles chiricanos con ropa vieja y como una espuma de sofrito, me dijo el salonero. El conjunto muy bueno. En las entradas también pedí un Napoleón que lo llaman así de salmón ahumado con langosta ajíes y aguacate, muy bueno tmb. De principal probamos la corvina con rissotto de coco y un salmón crujiente con una salsa como de almendras con azafrán, muy buena la combinación. No quedo espacio para el postre.