Ha sido favorable el cambio del restaurante a su nueva casa. Un sitio amplio y de ambiente agradable. El servicio impecable. Atentos en todo momento para que no te quedes sin alimentos en el plato. La comida muy buena. Los cortes de carne de buena calidad y su cocción al punto.

Desde el momento en que entré me fascinó el ambiente informal caribeño, con toques chic. Un ambiente relajado con magnífica atención. Los meseros conocen en detalle la oferta del menú, y sus recomendaciones estuvieron atinadas. Buenos cócteles, los platillos ejecutados magistralmente y postres novedosos.

Oferta gastronómica de buena calidad. Una carta corta, pero de sabores que te explotan el paladar por lo bien ejecutado que fueron realizados los platos. Para esta primera visita probamos tres entradas y dos platos fuertes que nos encantaron; en especial, las torrejitas de maíz nuevo con ropa vieja de tasajo y el rissotto de culantro con chorizo tableño y ralladura de queso blanco. Una verdadera fusión de la cocina panameña.

Maravillado del ambiente, buena atención y calidad de la comida. Llegué sin muchas expectativas, pues no tenía grandes referencias del sitio, y salí gratamente impresionado.

Primera vez que visito Wurst y quedé realmente impresionado por la fina atención y el buen gusto de la comida. La presentación de la comida es sencilla, pero los sabores son inmejorables. Una opción a considerar.

Es un sitio que te sorprende cada vez que lo visitas, pues se supera a sí mismo. Una agradable atención desde que entras al restaurante. La comida, inmejorable y en el apropiado punto de cocción.

Visitar cualquiera de los Paul qué hay en Panamá, siempre es un placer. Pero, debo hacer la salvedad que, específicamente, este Paul me encantó. Lo sentí más glamoroso. De la atención, no hay queja. Y la comida siempre bien presentada y con buen sabor. Comer en Paul es una buena opción siempre.

Excelente ambiente, comida maravillosamente ejecutada, y atención de primera. Cada vez que visito este restaurante es como si fuera la primera vez; una nueva experiencia de calidad.

Oferta variada de ceviches, frescos y de buen sabor. Adicionalmente, ofrecen y platos de pescado, mariscos y pollo cuya presentación pude ver y lucían deliciosos todos. Atención agradable, en un ambiente informal, para conversar y acompañar el ceviche o la comida con una cerveza bien fría.

Esta franquicia llegó a Panamá para quedarse. Al igual que en otros países, la comida tiene buen sabor y está bien ejecutada. La atención, maravillosa; te hacen sentir en la casa de la Nona. Buena opción para disfrutar de un almuerzo en familia o una cena en pareja.