Que tristeza que un lugar tan bello haya bajado la calidad tanto. Lo visité hace un año y me gusto el café y un postre de chocolate. Este año volvimos a pasar por allí y los cafés viejos en polvo, los postres con un aspecto pésimo derretidos, el local sucio.

Estuve pasando vacaciones en el hotel los mandarinos. Y nuestras cenas las comíamos en este bello restaurante: un ambiente top con una laguna hermosa afuera, buenísima atención, comida deliciosa aunque podrían agregar más variedad. Recomiendo el salmón en salsa de maracuya, la paella para dos, la sangria y el brownie con helado.

Comida clásica se fonda panameña pero en un ambiente agradable! Disfrutamos dos veces almorzar allí. Recomiendo el filete de pescado, las sopas (ambos días deliciosas) y la ensalada de habichuelas. Las chichas naturales también muy ricas. Vale la pena y mas el ahorro!